LD (EFE) Fuad Siniora, el primer ministro del Líbano, ha dicho que la ayuda económica internacional que la comunidad internacional ha comprometido en la Conferencia de París, garantizará el desarrollo de su país y traerá estabilidad política, social y económica a Oriente Medio.
Durante su intervención, Siniora agradeció de antemano la ayuda que medio centenar de países y organismos internacionales brindarán al programa de reformas, de carácter quinquenal, que su Gobierno aprobó recientemente y que requiere fondos para poder ser impulsado. La deuda libanesa supera los 40.000 millones de dólares (el 180 por ciento del PIB) y la intención del programa de reformas es reducirla hasta el 144 por ciento del PIB en el año 2011.
El primer ministro libanés dijo que en el Líbano "estamos al borde de una profunda recesión" y ante una larga crisis económica por el "ataque brutal e injustificado" del Ejército israelí el pasado verano, cuando se produjo una guerra de poco más de un mes contra los terroristas de Hezbolá.
La delegación de Arabia Saudí, que ya es el primer donante del Líbano, anunció una ayuda de 1.100 millones de dólares. Mil millones de ellos son para apoyar proyectos de desarrollo y que los otros 100 millones, en forma de donación, serán para respaldar el presupuesto libanés. La aportación saudí se suma a los 770 millones de dólares ya anunciados por EEUUs, los 500 millones de euros de Francia y 400 millones de la Comisión Europea. La aportación del Banco Mundial puede superar los mil millones de dólares, mientras que el Banco Europeo de Inversiones ha prometido 960 millones de euros, y el Banco Islámico de Desarrollo 250 millones de dólares.