LD (Agencias) Rajoy, acompañado por todos los dirigentes de su partido, afirmó que los españoles saben que el PP tiene un "proyecto de centro, reformista y liberal que se preocupa de los problemas reales de la gente" y unos candidatos "capaces" dispuestos a "dejarse la piel para atender los problemas".
"Han calado muy bien a Zapatero, la riada de problemas que ha provocado con su peculiar estilo de gobernar se palpa a diario. Por eso hay tanta gente que mira hacia el PP y tenemos que estar a la altura de ese reto", afirmó el máximo dirigente del PP, quien aseguró que tienen la responsabilidad "de dar confianza a quienes viven la desilusión de haber apoyado" al actual jefe del Ejecutivo.
Tras acusar a los socialistas de haber puesto en marcha "políticas de ruptura y confrontación", resaltó que "nunca ha habido tanto radicalismo, tantas cosas absurdas, tanta división y tanta falta de respeto a los intereses generales de los españoles".
Rajoy señaló que España "ha perdido una legislatura para preparar el futuro" y auguró que Zapatero "va a dejar una España dividida como nunca y con un horizonte lleno de incertidumbres".
Para el líder del PP "ya no basta con ejercer la oposición, sino que hay que darle respuesta con soluciones e iniciativas a los problemas", unas soluciones que están recogidas, recordó, en las conclusiones de las cuatro conferencias del partido -inmigración, seguridad, modelo de Estado y política económica y social- que serán la base del programa electoral para los comicios generales de 2008.
La solución está también, continuó, en el Programa Marco del PP -que se presentará en Madrid el 24 de febrero- y en la "apuesta por el centrismo liberal que defiende el PP en toda España"
Dirigiéndose a los candidatos del PP, Rajoy dijo que ellos tienen la tarea de "renovar la confianza" de quienes votaron a este partido y de "ganaros la confianza" de los que no lo hicieron y les insto a trasladar que este proyecto es una "alternativa abierta a todos".
En este sentido, llamó a los candidatos a "mirar por todos", a tener un "diálogo constante y directo" con los españoles y sus necesidades y a transmitirles que "hay salida a esta situación".
Aseguró que los ciudadanos pueden confiar en él y en cada uno de los candidatos y expresó su compromiso "ante todos los españoles" de "defender una alternativa de centro basada en la prudencia, la moderación y la sensatez".
Resaltó que el PP va a gobernar donde no lo hace actualmente porque sus ciudadanos, dijo, "también son ciudadanos de primera y requieren de un Gobierno" del Partido Popular.
"El Estado autonómico fue un acierto constitucional nacido del consenso y del espíritu de la Transición, un acuerdo ejemplar y generoso que nació con una intensa vocación de superar de una vez por todas nuestro difícil pasado", matizó.
Un consenso constitucional, aseguró, que "jamás se rompió" y "lo respetaron Suárez, Calvo Sotelo, Felipe González y lo respetó, como es natural, José María Aznar".
Apostó por seguir desarrollando el modelo de Estado actual y "no sustituirlo por otros". "No queremos ni federaciones, ni confederaciones, ni estados libres asociados", precisó.
"El PP es un partido autonomista y somos la alternativa al disparate de algunos y a las pretensiones decimonónicas de otros", señaló el líder de los populares.
En este sentido, abogó por "reducir los problemas" del modelo de Estado y "multiplicar sus ventajas" para obtener de él "todo su rendimiento propiciando con inteligencia y sensatez su reforma" y subrayó que el primer punto de su programa electoral para 2008 será recuperar el consenso constitucional.
Previamente al líder del PP, intervinieron todos los candidatos del partido de las comunidades que celebran elecciones el próximo 27 de mayo, que expresaron su respaldo a Rajoy y señalaron que se sienten plenamente identificados con su labor al frente del PP.
"Han calado muy bien a Zapatero, la riada de problemas que ha provocado con su peculiar estilo de gobernar se palpa a diario. Por eso hay tanta gente que mira hacia el PP y tenemos que estar a la altura de ese reto", afirmó el máximo dirigente del PP, quien aseguró que tienen la responsabilidad "de dar confianza a quienes viven la desilusión de haber apoyado" al actual jefe del Ejecutivo.
Tras acusar a los socialistas de haber puesto en marcha "políticas de ruptura y confrontación", resaltó que "nunca ha habido tanto radicalismo, tantas cosas absurdas, tanta división y tanta falta de respeto a los intereses generales de los españoles".
Rajoy señaló que España "ha perdido una legislatura para preparar el futuro" y auguró que Zapatero "va a dejar una España dividida como nunca y con un horizonte lleno de incertidumbres".
Para el líder del PP "ya no basta con ejercer la oposición, sino que hay que darle respuesta con soluciones e iniciativas a los problemas", unas soluciones que están recogidas, recordó, en las conclusiones de las cuatro conferencias del partido -inmigración, seguridad, modelo de Estado y política económica y social- que serán la base del programa electoral para los comicios generales de 2008.
La solución está también, continuó, en el Programa Marco del PP -que se presentará en Madrid el 24 de febrero- y en la "apuesta por el centrismo liberal que defiende el PP en toda España"
Dirigiéndose a los candidatos del PP, Rajoy dijo que ellos tienen la tarea de "renovar la confianza" de quienes votaron a este partido y de "ganaros la confianza" de los que no lo hicieron y les insto a trasladar que este proyecto es una "alternativa abierta a todos".
En este sentido, llamó a los candidatos a "mirar por todos", a tener un "diálogo constante y directo" con los españoles y sus necesidades y a transmitirles que "hay salida a esta situación".
Aseguró que los ciudadanos pueden confiar en él y en cada uno de los candidatos y expresó su compromiso "ante todos los españoles" de "defender una alternativa de centro basada en la prudencia, la moderación y la sensatez".
Resaltó que el PP va a gobernar donde no lo hace actualmente porque sus ciudadanos, dijo, "también son ciudadanos de primera y requieren de un Gobierno" del Partido Popular.
"El Estado autonómico fue un acierto constitucional nacido del consenso y del espíritu de la Transición, un acuerdo ejemplar y generoso que nació con una intensa vocación de superar de una vez por todas nuestro difícil pasado", matizó.
Un consenso constitucional, aseguró, que "jamás se rompió" y "lo respetaron Suárez, Calvo Sotelo, Felipe González y lo respetó, como es natural, José María Aznar".
Apostó por seguir desarrollando el modelo de Estado actual y "no sustituirlo por otros". "No queremos ni federaciones, ni confederaciones, ni estados libres asociados", precisó.
"El PP es un partido autonomista y somos la alternativa al disparate de algunos y a las pretensiones decimonónicas de otros", señaló el líder de los populares.
En este sentido, abogó por "reducir los problemas" del modelo de Estado y "multiplicar sus ventajas" para obtener de él "todo su rendimiento propiciando con inteligencia y sensatez su reforma" y subrayó que el primer punto de su programa electoral para 2008 será recuperar el consenso constitucional.
Previamente al líder del PP, intervinieron todos los candidatos del partido de las comunidades que celebran elecciones el próximo 27 de mayo, que expresaron su respaldo a Rajoy y señalaron que se sienten plenamente identificados con su labor al frente del PP.
"Una España fuerte, solidaria y cohesionada"
Los candidatos del PP a la presidencia de las CC.AA que celebran elecciones el 27 de mayo defendieron una España fuerte, solidaria y cohesionada frente al proyecto de José Luis Rodríguez Zapatero, y se sintieron plenamente identificados con la labor que desarrolla Mariano Rajoy al frente del partido.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, dijo que pretende "renovar la confianza de los madrileños y luchar con todas las fuerzas y energías" para ganar las elecciones autonómicas, que se celebrarán el próximo 27 de mayo.
Aguirre hizo estas declaraciones en la convención de candidatos autonómicos de su partido celebrada esta mañana en el Palacio de Congresos de la capital, y que contó con la presencia e intervención del presidente del PP, Mariano Rajoy.
La presidenta regional recordó durante su breve intervención que "las manifestaciones de los últimos meses" son el modo que tienen los ciudadanos de participar en las decisiones políticas de los gobiernos.
Del mismo modo, Aguirre dijo sentirse "orgullosa del nuevo proyecto común capaz de ilusionar a todos", y señaló que "las personas quieren que los políticos hablen de futuro y no que sean políticos de pasado".
En este acto, Aguirre apoyó las candidaturas de los dirigentes 'populares' que encabezan las listas de las diversas Comunidades Autónomas, y reiteró que éstos proponen "proyectos prósperos con más oportunidades y que miran al futuro".
Aguirre afirmó que "Madrid ha cambiado desde que gobierna el Partido Popular", y que se trata de la "región líder de España", la cual desea que llegue a ser "la región más atrayente de Europa". Por otro lado, aseveró que "Madrid ha dejado el pesimismo que les gusta a los socialistas" gracias a los dirigentes del PP que se encuentran en el Gobierno regional.
"Es necesario que el PP gane las elecciones autonómicas en Madrid para que la ciudad prospere, avance y siga con su proceso de vanguardia, y consiga llevar a Mariano Rajoy a la Moncloa", concluyó la presidenta de la Comunidad de Madrid.
El candidato a la reelección en la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, resaltó que su autonomía es "ejemplo de gobiernos del PP", "hay más empleo y más oportunidades", y todo ello, dijo, "con lealtad absoluta al proyecto de España que hacemos grande en la Comunidad Valenciana porque queremos hacer grande a toda España".
El presidente de Baleares, Jaume Matas, quien no pudo asistir al acto, recordó en un vídeo que hace cuatro años padecieron una "mala experiencia" (un gobierno socialista) que "afortunadamente se ha superado con creces y con buena gestión", por lo que garantizó que su partido va a hacer la "mejor campaña electoral de la historia democrática de las islas" y ganará los comicios.
Juan Vicente Herrera, presidente castellano-leonés, expresó su deseo de seguir profundizando en el desarrollo autonómico de su Comunidad sobre las bases que constituyen el sello de identidad del PP, como son "la pertenencia de España, la plena vigencia de la Constitución y la exigencia de un Estado fuerte que garantice la solidaridad y la igualdad entre territorios".
El presidente de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, también mediante un vídeo, aseguró que pretende "dar un nuevo impulso político" a su región, señaló que "cada gota de agua es una gota de vida" y, por eso, apostilló, su Comunidad necesita un "proyecto solidario cohesionado que garantice esa imprescindible herramienta de desarrollo".
Apuntó que Murcia es una región "implicada en el proyecto único llamado España, una nación plural y no una pluralidad de naciones".
El presidente riojano, Pedro Sanz, ensalzó el proyecto que representa Rajoy, advirtió de que el PP no consentirá que se adopten decisiones que "ataquen" algo que consideró como un patrimonio de su Comunidad, el vino, y aseguró que él es un hombre de palabra frente a las palabras carentes de hechos que representan los socialistas.
El presidente de Ceuta y candidato a la reelección, Juan Jesús Vivas, agradeció a Rajoy su apoyo permanente que evidencia, dijo, "la actitud partidista e insolidaria del Gobierno", y aseguró que se presenta a las elecciones para "seguir con la modernización y desarrollo" de su ciudad "en el seno común de una España unida, fuerte y solidaria".
Juan José Imbroda, presidente de Melilla, acusó al Gobierno de Zapatero de, en vez de estar al lado de su ciudad, "estar enfrente", y "en vez de colaborar, ningunear, zancadillear", pero subrayó que, a pesar de eso, el PP volverá a ganar los comicios porque ha dado estabilidad política.
El candidato a la Presidencia de Extremadura, Carlos Floriano, se comprometió a crear una "Extremadura de calidad" y resolver el "cuello de botella" de la economía extremeña que produce pero no transforma y no industrializa "porque carece de sello propio", y, así, recordó que, siendo uno de los máximos productores de tomate, la Comunidad no ha sabido sacarle rédito.
Aquí, Floriano mostró a los asistentes un tomate extremeño y lo puso de ejemplo de esa "marca propia de calidad", de esa apuesta por lo "ecológico, lo limpio y lo productivo" por la que luchará el PP si llega al Gobierno extremeño.
La candidata en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, aseguró que su objetivo es que su Comunidad deje de ser "una de las dos regiones más pobres de toda España", y subrayó que, actualmente, su región sufre un "ataque directo a la democracia" porque el PSOE quiere "cambiar las normas electorales", a pesar de lo cual garantizó que el PP conseguirá que su región "tenga por fin el cambio y la libertad que se merece".
El aspirante a la Presidencia del Gobierno canario, José Manuel Soria, expresó su orgullo por esa candidatura mientras que aseguró que para el candidato socialista, Juan Fernando López Aguilar, su designación es "una auténtica pesadilla", y acusó a Zapatero de haber cometido la "enorme irrespondabilidad" de "haber abierto la puerta de entrada a la inmigración ilegal procedente de Africa".
El candidato en Asturias, Ovidio Sánchez, expresó su convicción de que ganará las elecciones porque los ciudadanos de su región están "hartos de pesimismo, engaños y justificaciones y de que el Gobierno haya retrasado todas las obras de infraestructuras y de futuro", al tiempo que explicó que su objetivo será "fortalecer" desde su comunidad la "España de la igualdad y la solidaridad".
Juan Ignacio Diego, quien aspira a la Presidencia de Cantabria, reprochó al PSOE que, en las últimas elecciones en su Comunidad, diera la Presidencia a Miguel Angel Revilla cuando fue el candidato menos votado, y aseguró que, desde entonces, el PP ha experimentado "un proceso de renovación ejemplar" con el que se mostró convencido de que vencerá en las elecciones.
El candidato a la Presidencia de Aragón, Gustavo Alcalde, apostó por que, tras esos comicios "se cierren las puertas" al proyecto de Marcelino Iglesias y "a la franquicia y sucursal de Zapatero en Aragón", y aseguró que su Comunidad quiere "subirse al carro del progreso real" que representan Rajoy y el PP.