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Los aspirantes al título pasan duros exámenes antes de volver a la Champions

Después de una semana movidita -el lío Eto’o-Ronaldinho-Laporta-Rijkaard-Rosell, la pataleta de Robinho, la marcha de Ayala y los conflictos Betis-Sevilla-, llega la vigésima tercera jornada cargada de interesantes partidos. Días antes de jugar la Champions, Valencia y Barcelona se citan en Mestalla en lo que se antoja un duelo decisivo de cara al final de la temporada. El Real Madrid recibe al Betis, con quien ha empatado dos veces en el último mes –lo que supuso su eliminación de la Copa-, mientras el Sevilla y el Atlético de Madrid cierran la jornada en el Sánchez Pizjuán.

Después de una semana movidita -el lío Eto’o-Ronaldinho-Laporta-Rijkaard-Rosell, la pataleta de Robinho, la marcha de Ayala y los conflictos Betis-Sevilla-, llega la vigésima tercera jornada cargada de interesantes partidos. Días antes de jugar la Champions, Valencia y Barcelona se citan en Mestalla en lo que se antoja un duelo decisivo de cara al final de la temporada. El Real Madrid recibe al Betis, con quien ha empatado dos veces en el último mes –lo que supuso su eliminación de la Copa-, mientras el Sevilla y el Atlético de Madrid cierran la jornada en el Sánchez Pizjuán.
(Libertad Digital) El Valencia-Barcelona es el partido de la jornada. Cuarto contra primero. El Valencia viene de sufrir un grave traspiés en Getafe, donde perdió por 3-0, y el Barcelona llega en medio de una gran crisis desatada por las polémicas declaraciones de Samuel Eto’o, quien el pasado miércoles tiró contra todo lo que se le pasó por la cabeza. Frank Rijkaard espera ahora que, si cuando se le pone un micrófono sacude con fiereza, recupere ese mismo instinto que le aflora cuando es un balón lo que tiene al alcance. Al final, los goles, las victorias y los puntos son los que determinan si las heridas han cicatrizado, si el proyecto deportivo funciona o si es aspirante sigue teniendo opciones de luchar por el título.

El Real Madrid se enfrenta al Betis en el Santiago Bernabéu y el término 'examen de reválida' es el que mejor se ajusta a la realidad del club blanco. No sólo va a ser un examen, sino que los próximos seis partidos, serán seis oposiciones a candidato a todo o a nueva decepción. Y sería la cuarta consecutiva. La victoria en San Sebastián, la semana pasada, permitió a los de Fabio Capello sacar mínimamente la cabeza y poder coger aire, pero un nuevo fallo en casa provocaría una hecatombe de proporciones desconocidas. El Betis ya se ha puesto la piel de cordero y su entrenador, Luis Fernández, ya ha manifestado que perder en Madrid no sería grave, aunque lo que no ha dicho es que ganar en el Bernabéu sería todo un refrendo a su gestión y una importante patada hacia arriba para su equipo.

El Sevilla recibe al Atlético de Madrid en otro choque de alto voltaje. Los andaluces siguen sin estar al nivel de los cuatro primeros meses de competición, aunque también es verdad que siguen estando arriba, pese a los tropiezos. Los madrileños, con sus problemas y altibajos, también están ahí, llamando a las puertas de la Liga de Campeones. Y fuera del Vicente Calderón, hasta el momento, parecen más peligrosos.

 A estas alturas de competición todos los puntos son importantes para todos los equipos y el resto de choques también tienen gran trascendencia para sus protagonista. En el polo opuesto, el Nastic, el último clasificado, visita a un Racing que parece asentado en aguas tranquilas, pero que no puede confiarse, mientras que la Real Sociedad viaja a Huelva para enfrentarse al Recreativo con la imperiosa necesidad de ganar. En el Celta los problemas crecen de manera exponencial conforme se dejan de sumar puntos. Ya está en puestos de descenso y los nervios, más que crecer, se multiplican por Vigo. Pamplona no parece el mejor sitio para arreglar la situación, dado el buen momento de
Osasuna, pero es lo que hay.

Prácticamente en la misma circunstancia se encuentra el Athletic, otro histórico en apuros, que recibe al Getafe, uno de los mejores equipos en lo que llevamos de año. Será una prueba de fuego para los 'leones' bilbaínos. Los partidos Zaragoza-Villarreal, Espanyol-Mallorca y Deportivo-Levante, también prometen intensidad e incertidumbre, nadie quiere ceder puntos y todos pondrán toda la carne en el asador. El aficionado sale ganando.

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