L D (Agencias) Las mismas fuentes informaron de que el centenar de españoles que reside en Kinshasa se encuentra a salvo, después de los enfrentamientos ocurridos este jueves entre soldados del Gobierno y la guardia del ex vicepresidente Jean-Pierre Bemba.
El Director General de Comunicación Exterior del Ministerio de Asuntos Exteriores, Manuel Cacho, destacó que un proyectil ha dejado un "agujero en la sala de espera" de la embajada y explicó que el ataque guarda total relación con los "violentos enfrentamientos" que este jueves se desataron a mediodía entre las fuerzas congoleñas leales al candidato presidencial Jean-Pierre Bemba y las del actual presidente, Joseph Kabila, en las inmediaciones de la residencia del primero.
Por otra parte, Cacho incidió en que en el momento en el cual el contingente uruguayo evacuó a los empleados españoles persistía todavía el "fuego cruzado" entre las partes en liza, lo que obligó a las tanquetas de Naciones Unidas a "repeler" algunos ataques, si bien subrayó que en la actualidad el enfrentamiento en la capital congoleña ha cesado.
Según explicó el Director General de Comunicación Exterior un contingente de la ONU escoltó a los empleados españoles hasta un acuartelamiento de Naciones Unidas en Kinshasha, los cuales se encuentran "bien", según le confirmó el embajador de España en Kinshasha, Miguel Fernández-Palacios Martínez, al ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, quien telefoneó personalmente al embajador para conocer de cerca la situación actual en Kinshasha. La plantilla de la embajada española iba a ser trasladada a otra dependencia de Naciones Unidas con la intención de ofrecerle las mejores condiciones posibles.
Por otra parte, Cacho precisó que el personal de la embajada estuvo "entre tres y cuatro horas" acuartelada en la legación corriendo cierto peligro debido a que la dependencia diplomática española se encontró en medio del fuego cruzado hasta la llegada del contingente uruguayo.
Fernández-Palacios en declaraciones a la cadena SER, recogidas por Europa Press, explicó que "todos" los cristales de la embajada se encuentran "rotos de los tiros", tras confirmar que un obús se "ha llevado por delante media sala de espera". "Estábamos todos bien refugiados en el centro de la embajada con muros a ambos lados y en el suelo", incidió el embajador, y añadió que las fuerzas uruguayas de la ONU consiguieron evacuarles "con tanquetas con fuego" y explicó que todos salieron, incluido el propio embajador, "con chalecos antibala".