L D (EFE) La situación se produjo en el control de dopaje tras el partido de vuelta de octavos de final contra el Real Madrid (2-1). Kahn entregó su prueba una hora y media después del final del encuentro, pero el médico no la aceptó como válida porque no le había visto orinar y le obligó a repetirla. Fue entonces cuando el jugador explotó, insultó al médico, tiró la prueba a la papelera y, de paso, manchó los documentos del controlador.
El Bayern Múnich decidirá la próxima semana si presenta recurso contra la sanción por un partido impuesta por la UEFA, con el argumento de que necesita primero estudiar la decisión y examinar sus contenidos jurídicos. Kahn admitió luego su conducta incorrecta y pidió disculpas al médico, contando con que el asunto se liquidaría con una multa. En caso de que la sanción se mantenga, en el partido de ida de cuartos de final contra el Milán, Kahn tendría que ser sustituido por Michael Rensing.
En Milán, el Bayern también tendrá que prescindir del centrocampista holandés Mark Van Bommel, suspendido tras ser expulsado en el partido contra el Real Madrid.
El Bayern Múnich decidirá la próxima semana si presenta recurso contra la sanción por un partido impuesta por la UEFA, con el argumento de que necesita primero estudiar la decisión y examinar sus contenidos jurídicos. Kahn admitió luego su conducta incorrecta y pidió disculpas al médico, contando con que el asunto se liquidaría con una multa. En caso de que la sanción se mantenga, en el partido de ida de cuartos de final contra el Milán, Kahn tendría que ser sustituido por Michael Rensing.
En Milán, el Bayern también tendrá que prescindir del centrocampista holandés Mark Van Bommel, suspendido tras ser expulsado en el partido contra el Real Madrid.