L D (EFE) El portavoz de Educación del PP vasco, Iñaki Oyarzábal, aseguró este domingo que la situación vivida por dos padres colombianos, a los que el Departamento de Educación habría obligado a matricular a su hija en una ikastola –un tipo de escuela que da enseñanza integral en euskera–, es "un escándalo", por lo que anunció varias iniciativas parlamentarias por la vía urgente que serán presentadas el lunes.
En declaraciones a Europa Press, Oyarzábal advirtió de que "noticias como ésta provocan cierta alarma social y sobre todo mucha preocupación en las familias".
Al parecer, los padres de una niña colombiana decidieron matricular a la menor en un colegio de Portugalete de modelo A (castellano). Al realizar esta matrícula, se habría puesto en marcha un protocolo de actuación del Departamento de Educación, que encarga a una comisión de escolarización la elección de centro para los menores extranjeros, y que decidió que la niña colombiana debía ser escolarizada en una ikastola de la misma villa portugaluja. Los padres presentaron el jueves un recurso ante la Delegación de Educación.
En este sentido, Oyarzabal anunció una proposición no de ley urgente "para que se resuelva de manera inmediata esta situación y que, de una vez por todas, pongan en marcha los mecanismos que garanticen la libertad de elección de los padres", que, denunció, "no se respeta" ya que "se está tratando de condicionar y coaccionar a los padres para que no matriculen a sus hijos donde quieren".
"Vamos a pedir también la comparecencia del delegado de Educación de Bizkaia y vamos a exigir que se abra un expediente informativo, por si hubiese que exigir responsabilidades a las personas que aparecen aquí retratadas y que han atendido de tan mala manera a estos padres", añadió.
Asimismo, indicó que en el actual contexto de posible reforma de modelos lingüísticos, "en ningún caso se puede avanzar, si no es con la premisa básica de respetar la libertad de los padres a elegir la libertad de sus hijos y el respeto a la lengua materna, que es un derecho reconocido en todos los tratados internacionales".
"Parece que en nuestra comunidad este derecho resulta dificilísimo de entender", concluyó.