L D (EFE) En toda Cataluña, los Bomberos de la Generalidad han efectuado desde el lunes 104 salidas a causa de incidencias relacionadas con las fuertes lluvias, a las que se suman las sesenta salidas de los Bomberos de Barcelona, en ambos casos para extraer agua de bajos y garajes, retirar árboles de la calzada o vehículos embarrancados.
Desde anoche, el Centro de Emergencias de Cataluña mantiene activado el plan especial de emergencias (Inuncat) en las comarcas del Baix Ebre, Ribera d'Ebre y Montisà, por riesgo de inundaciones en el tramo final del Ebro, aunque a primera hora de la tarde lo ha rebajado de la fase de alerta a la de prealerta, ante la previsión de que no cese el temporal hasta el miércoles por la tarde. En concreto, estas comarcas han estado pendientes del caudal del río Ebro, que ha estado a punto de desbordarse en algunas localidades y que incluso ha inundado algunas huertas situadas al lado del río.
La punta de la crecida extraordinaria del Ebro ha alcanzado a las 06.00 horas de este martes los 1.880 metros cúbicos por segundo en Ascó (Tarragona) y los 1.635 en Tortosa (Tarragona). En este sentido, el alcalde de Miravet, Antoni Borrell, ha criticado a las empresas hidroeléctricas por mantener los embalses al tope de su capacidad en las últimas semanas a pesar de que las previsiones meteorológicas ya advertían del riesgo de fuertes lluvias.
El momento más trágico de este temporal se registró anoche en la población tarraconense de L'Aleixar, cuando un hombre de 42 años, Dan Ioan Virgil, de nacionalidad rumana y vecino de Vilaplana, falleció tras caer a una riera y ser arrastrado por las aguas, cuando intentaba cruzar andando la riera junto con un compañero. Además, esta mañana los Bomberos han tenido que rescatar a una mujer, Carla S., quien conducía un vehículo que fue arrastrado por las fuertes lluvias en un paso subterráneo de Arenys de Mar (Barcelona).
Pese a las fuertes lluvias de los últimos días, el gobierno catalán ha aprobado el decreto de sequía, que entrará en vigor la próxima semana, ya que el agua caída no ha sido suficiente para mejorar el estado de los embalses de las cuentas internas. Además, la lluvia se presenta como una de los principales riesgos ante el aumento del tráfico que se registra en Semana Santa, según ha informado hoy el Servicio Catalán de Tráfico, que ha advertido de que tanto la operación salida como la de retorno serán "muy conflictivas" debido a las inclemencias meteorológicas. En cambio, la lluvia caída en las últimas horas ha salvado parte de la temporada de la cosecha de cereales, olivos y almendros, que se presentaba muy complicada, según los sindicatos agrarios.
Desde anoche, el Centro de Emergencias de Cataluña mantiene activado el plan especial de emergencias (Inuncat) en las comarcas del Baix Ebre, Ribera d'Ebre y Montisà, por riesgo de inundaciones en el tramo final del Ebro, aunque a primera hora de la tarde lo ha rebajado de la fase de alerta a la de prealerta, ante la previsión de que no cese el temporal hasta el miércoles por la tarde. En concreto, estas comarcas han estado pendientes del caudal del río Ebro, que ha estado a punto de desbordarse en algunas localidades y que incluso ha inundado algunas huertas situadas al lado del río.
La punta de la crecida extraordinaria del Ebro ha alcanzado a las 06.00 horas de este martes los 1.880 metros cúbicos por segundo en Ascó (Tarragona) y los 1.635 en Tortosa (Tarragona). En este sentido, el alcalde de Miravet, Antoni Borrell, ha criticado a las empresas hidroeléctricas por mantener los embalses al tope de su capacidad en las últimas semanas a pesar de que las previsiones meteorológicas ya advertían del riesgo de fuertes lluvias.
El momento más trágico de este temporal se registró anoche en la población tarraconense de L'Aleixar, cuando un hombre de 42 años, Dan Ioan Virgil, de nacionalidad rumana y vecino de Vilaplana, falleció tras caer a una riera y ser arrastrado por las aguas, cuando intentaba cruzar andando la riera junto con un compañero. Además, esta mañana los Bomberos han tenido que rescatar a una mujer, Carla S., quien conducía un vehículo que fue arrastrado por las fuertes lluvias en un paso subterráneo de Arenys de Mar (Barcelona).
Pese a las fuertes lluvias de los últimos días, el gobierno catalán ha aprobado el decreto de sequía, que entrará en vigor la próxima semana, ya que el agua caída no ha sido suficiente para mejorar el estado de los embalses de las cuentas internas. Además, la lluvia se presenta como una de los principales riesgos ante el aumento del tráfico que se registra en Semana Santa, según ha informado hoy el Servicio Catalán de Tráfico, que ha advertido de que tanto la operación salida como la de retorno serán "muy conflictivas" debido a las inclemencias meteorológicas. En cambio, la lluvia caída en las últimas horas ha salvado parte de la temporada de la cosecha de cereales, olivos y almendros, que se presentaba muy complicada, según los sindicatos agrarios.