L D (Agencias) Los militares españoles patrullaban este viernes por los alrededores de la aldea de Bourrhoz, en el noroeste de la zona responsabilidad de la Brigada Multinacional, cuando encontraron el arsenal. Como está establecido, la patrulla informó del hallazgo tanto a la FINUL como a las Fuerzas Armadas libanesas y se quedó custodiando el depósito a la espera de la llegada de los efectivos libaneses. Cuando llegaron, los militares españoles permanecieron en las inmediaciones del depósito para recabar información sobre el material encontrado y prestar ayuda, explica Defensa.
Este pasado sábado las Fuerzas Armadas libanesas procedieron a la destrucción o a la retirada en camiones del material incautado, con lo que, concluida la operación, la patrulla española regresó a la base "Miguel de Cervantes". Según precisa el Ministerio de Defensa, el Ejército libanés retiró cerca de trescientas granadas de mortero y anticarro, 59 cohetes y dos mecanismos de ametralladora Browning. Además destruyó en el mismo lugar del hallazgo más de sesenta cohetes, seis misiles TOW, 27 "Bobby trap" (bombas trampa que simulan piedras), 250 proyectiles antiaéreos incendiarios, varias granadas y dos lanzagranadas. Otros dos lanzagranadas y un tubo de mortero, añade, fueron también destruidos y abandonados como chatarra.
De acuerdo con las decisiones del Gobierno libanés y la resolución 1710 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, las Fuerzas Armadas libanesas asistidas por la FINUL colaboran para garantizar que el área comprendida entre el río Litani y la Línea Azul (la frontera del Líbano con Israel) está libre de personal armado, municiones y armas que no sean las del Gobierno libanés o las de la FINUL. Hasta el momento y desde principios de septiembre, apunta Defensa, la FINUL ha descubierto en siete ocasiones armamento no autorizado.
El batallón de la X Bandera de la Legión española que lidera la Brigada multinacional responsable del sector sureste de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) ha conseguido desactivar más de 500 artefactos explosivos desde su llegada al país de los cedros, según informaron fuentes de la fuerza multinacional de Naciones Unidas. Estas fuentes explicaron que una gran parte de los artefactos anulados se encontraba en zonas con población civil, incluidas viviendas, campos de cultivo.
Este pasado sábado las Fuerzas Armadas libanesas procedieron a la destrucción o a la retirada en camiones del material incautado, con lo que, concluida la operación, la patrulla española regresó a la base "Miguel de Cervantes". Según precisa el Ministerio de Defensa, el Ejército libanés retiró cerca de trescientas granadas de mortero y anticarro, 59 cohetes y dos mecanismos de ametralladora Browning. Además destruyó en el mismo lugar del hallazgo más de sesenta cohetes, seis misiles TOW, 27 "Bobby trap" (bombas trampa que simulan piedras), 250 proyectiles antiaéreos incendiarios, varias granadas y dos lanzagranadas. Otros dos lanzagranadas y un tubo de mortero, añade, fueron también destruidos y abandonados como chatarra.
De acuerdo con las decisiones del Gobierno libanés y la resolución 1710 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, las Fuerzas Armadas libanesas asistidas por la FINUL colaboran para garantizar que el área comprendida entre el río Litani y la Línea Azul (la frontera del Líbano con Israel) está libre de personal armado, municiones y armas que no sean las del Gobierno libanés o las de la FINUL. Hasta el momento y desde principios de septiembre, apunta Defensa, la FINUL ha descubierto en siete ocasiones armamento no autorizado.
La Legión ha desactivado más de 500 artefactos
Los expertos militares españoles ha acudido a desactivar dispositivos por solicitud del Ejército libanés ante requerimientos de autoridades locales y población civil. A lo largo y ancho de la zona sur del territorio libanés, especialmente en la zona de responsabilidad de la FINUL, que abarca la frontera entre Israel y Líbano, desde la denominada "línea azul" hasta el río Litani, se encuentra todavía un importante número de proyectiles de guerra que no estallaron durante el último conflicto entre las Fuerzas de Defensa Israelíes (IDF) y el grupo terrorista "Hezbolá".
Según los análisis elaborados por la inteligencia militar española antes del despliegue en Líbano, unos 150 millones de metros cuadrados del territorio del país de los cedros estarían afectados por minas o por los denominados artefactos sin explosionar (UXO, en terminología militar internacional), de los cuales sólo 33,8 millones de metros cuadrados habían sido desminados por el Ejército libanés y otras organizaciones.