LD (Efe) García ha explicado a la prensa tras llegar al aeropuerto de El Prat procedente de Atenas, que, al principio "vieron a la tripulación salvavidas y gente que subía y bajaba" y asegura que se vivió "un caos", aunque "tuvimos la suerte de ocupar la segunda lancha".
Joan García, que ha llegado a Barcelona junto con un grupo de pasajeros del crucero siniestrado, ha señalado que al principio sintieron "preocupación, y después apuro y miedo", porque vieron cómo el barco se hundía 6 metros en 10 minutos.
También ha explicado que antes de que encallase el barco estaba grabando la llegada a la isla Santorini cuando sintieron algo parecido a una "rascada" del casco del barco y ha asegurado que hasta esta mañana no se han enterado de que hay dos personas desaparecidas y de que el crucero se ha hundido.
Una veintena de turistas que viajaban en el crucero Sea Diamond han llegado esta tarde procedente de Atenas al aeropuerto de El Prat de Barcelona, donde les esperaban sus familiares. O
Joan García, que ha llegado a Barcelona junto con un grupo de pasajeros del crucero siniestrado, ha señalado que al principio sintieron "preocupación, y después apuro y miedo", porque vieron cómo el barco se hundía 6 metros en 10 minutos.
También ha explicado que antes de que encallase el barco estaba grabando la llegada a la isla Santorini cuando sintieron algo parecido a una "rascada" del casco del barco y ha asegurado que hasta esta mañana no se han enterado de que hay dos personas desaparecidas y de que el crucero se ha hundido.
Una veintena de turistas que viajaban en el crucero Sea Diamond han llegado esta tarde procedente de Atenas al aeropuerto de El Prat de Barcelona, donde les esperaban sus familiares. O
Alonso criticó el trato recibido en el hospital de Santorino, donde fueron atendidos los heridos, ya que dijo "me he sentido una basura, como si no fuera europeo, ya que eso parecía EEUU, porque sólo prestaban atención a los americanos".
Su madre, Laura Toledano , comentó en el aeropuerto de Barajas, a donde llegaron en un vuelo de Iberia procedente de Atenas, que estaba tomando fotografías de la entrada del crucero en Santorini, cuando oyeron un golpe muy fuerte y un crujido.
"Pero los de la naviera (la compañía Louis Cruiser Lines ) no dieron la voz de alarma, ni dijeron nada. Les veíamos con los chalecos y sólo nos decían que estuviéramos tranquilos", relató y señaló que a los tres cuartos de hora de escucharse el golpe (sobre las 15.30 horas de ayer) la gente empezó a gritar que había agua en la segunda planta.
En esa planta se encontraba su hijo, por lo que Laura Toledano se dirigió a esa zona y comprobó que los pasajeros estaban ya empezando a subir a la cubierta.
Toledano calificó de "maravilloso" el trato de la "gente de Santorini, que "nos dieron de cenar y nos atendieron en hoteles", pero criticó la atención en el barco que les trasladó desde Santorini a Atenas, ya que, dijo, "no teníamos ni mantas, ni dinero, ni nada, porque lo habíamos dejado todo en el barco", que fue remolcado aguas adentro del puerto de Santorini, donde se hundió.
Toledano agradeció la labor desarrollada por la embajada de España en Grecia, que ha gestionado los viajes de vuelta de los españoles, y señaló que esta tarde han regresado a Madrid 17 personas y otras 5 a Barcelona y se espera que entre mañana y pasado "vuelva el resto, ya que había gente que tenía el viaje programado hasta el domingo y han decidido quedarse".
"Pero nosotros ya no teníamos ganas de nada. Ahora hablaremos con la agencia de viajes y con Visa para que ver qué podemos reclamar", manifestó.
El crucero se hundió 15 horas después del siniestro en una zona de 240 metros de profundidad y hay dos ciudadanos franceses desaparecidos, un padre y su hija.
En el barco viajaban 1.155 turistas, de los que 112 eran españoles, 108 adultos y 4 niños.