(Libertad Digital) El pasado sábado, la delegación Gallega de la Federación Autonómica de Víctimas del Terrorismo (FAVT) -organización que impulsó Peces Barba y cuyos miembros también son socios de la AVT)- celebró una asamblea, en la que su presidente, Ángel Penas, tendría que dar cuenta de unos gastos relacionados con viajes de miembros de la asociación que, algunos asistentes, no creían suficientemente justificadas.
Uno de los socios, Eloy Ruiz Cortadi, se había puesto en contacto con Penas unos días antes de la asamblea para solicitarle su dimisión, ya que no estaba contento con su gestión. Según ha contado Ruiz a Libertad Digital, el propio Ángel Penas le comunicó que aceptaba y que dimitía porque "estaba cansado y tenía ganas de dejarlo todo". Fue entonces cuando tomó la decisión de presentar su candidatura.
Hasta aquí todo normal. En cambio, cuando llegó comenzó la asamblea, Ruiz Cotadi vió en la mesa presidencial a Ángel Penas. Ruiz no entendía por qué ocupaba ese sitio si había dimitido. Entonces, Penas que no, que no dimitía y comenzó a pronunciar un discurso. En la reunión los presentes le volvieron a pedir que dimitiera y aceptó. En ese momento Ruiz Cortadi se acercó a la mesa presidencial para presentar su candidatura. En declaraciones a Libertad Digital, afirma que, mientras se dirigía a los asistentes, Penas le insultaba e intentaba grabar su alocución con una pequeña grabadora.
Ruiz, que no había dado su permiso para que su discurso quedara registrado, le pidió que la retirara. Penas insistió en mantenerla y Ruiz Cortadi la cogió y la lanzó a los asientos que tenía en frente. En ese momento, Ángel Penas se levantó y le propinó cuatro bofetadas. Ruiz Cortadi decidió no defenderse para no elevar más la tensión que allí se vivía. Finalmente la policía se presentó y levantó atestado.
Ruiz acudió a la Policía a poner una querella y a un centro de salud donde los sanitarios levantaron un parte de lesiones. El siguiente capítulo de esta historia se escribirá este martes cuando se celebra un juicio rápido. En declaraciones a Libertad Digital, el agredido ha confesado sospechar que Penas podría presentar un testigo falso en el juicio.