(Libertad Digital) Según publica este domingo El Mundo, tanto Guillermo Fernández Vara, en Extremadura, como José María Barreda, en Castilla La Mancha, ganarían por mayoría absoluta las elecciones, pasando así de ser los sucesores designados a dedo por sus antecesores en el cargo a convertirse en indiscutibles líderes de sus respectivas comunidades autónomas, aunque eso sí con una ligera merma en sus votos. En Extremadura, además, podría desaparecer Izquierda Unida, según el sondeo de Sigma Dos.
En Canarias, los socialistas obtendrían el 31% de los votos, el PP le seguiría de cerca con un 30% de sufragios y Coalición Canaria (CC) bajaría hasta un 27,8%. Unos resultados que obligan a la formación de un gobierno de coalición al no alcanzar ninguno de los tres partidos la mayoría absoluta. Al comienzo de esta legislatura que está en su recta final, CC tuvo el respaldo del PP en el Gobierno autonómico canario, aunque el acuerdo terminó con la expulsión del PP del ejecutivo regional un año después de que se produjera el cambio de signo en el Gobierno central. En cuanto a valoración de sus líderes, Juan Fernando López Aguilar candidato del PSOE se situaría en primera posición, seguido de cerca por el líder de CC, Paulino Rivero, y en tercera posición el líder del PP, José Manuel Soria López.
En Asturias, Cantabria y Aragón, el PSOE podría repetir gobierno en coalición según la pura aritmética parlamentaria. Aunque es en Asturias donde se abre una cierta duda para los socialistas en beneficio del Partido Popular. En esta legislatura que está a punto de terminar, el socialista Vicente Álvarez Areces ha gobernado gracias a un acuerdo con Izquierda Unida con el que sumaban la mayoría absoluta. Ahora, en el mejor de los casos para el PP, podría ser que los populares llegaran a ser el partido más votado pero con francas dificultades para acceder a la mayoría absoluta.
En Aragón, su presidente Marcelino Iglesias parece incombustible y, en contra de experimentar desgaste alguno, su expectativa de voto podría verse aumentada casi cuatro puntos lo que le haría ganar tres escaños.
En Cantabria, un caso peculiar, gobierna la tercera fuerza política el Partido Regionalista de Cantabria (PRC) que lidera Miguel Ángel Revilla, gracias a un acuerdo maquinado por Alfredo Pérez Rubalcaba en su día para desplazar al PP del Gobierno y por el que el PSOE se coaligó con PRC. La popularidad de Miguel Ángel Revilla hacen que su partido suba en intención de voto y el PSO pueda mejorar también su posición, todo ello en detrimento de los votos del PP.