L D (EFE) "Creo que ha visto otro partido, y sólo después de unas diez o veinte copas podría estar de acuerdo con él", comentó el técnico holandés, mucho más expresivo en sus valoraciones que en el resto de partidos del campeonato. "Me gustaría recibir cada domingo una lección de fútbol así", añadió con ironía.
Rijkaard, además, pidió protección para el juego de sus futbolistas y lamentó la expulsión de Ronaldinho, símbolo a su juicio de la injusticia que se comete con su equipo. "Nuestro estilo no es la contundencia, sino crear y tocar, con jugadores que casi nunca hacen faltas pero siempre las reciben, en ese sentido, de vez en cuando tienes que protegerte", comentó.
El entrenador azulgrana aprovechó la tarjeta roja al futbolista brasileño para profundizar en su queja sobre la actuación arbitral con respecto a sus estrellas. "Es una lástima que nosotros siempre estemos intentando jugar y que nos llevemos la expulsión. Es algo sorprendente, porque nuestro estilo no es la mala leche; pero a veces parece que lo mejor es actuar más como el Getafe, al mínimo contacto, te caes al suelo y gritas pidiendo tarjeta. Ronaldinho o Messi, en cambio, siguen con el balón pese a las patadas porque aman el fútbol".
Rijkaard criticó la actitud del Getafe y aseguró incluso que "una vez en su vida tuvo suerte porque nosotros fallamos completamente", en alusión al partido de Copa en el que el Barça cayó eliminado de la Copa en el Alfonso Pérez Muñoz (4-0). "Cuando ves que un equipo quiere jugar y otro destrozar, es una pena que ellos parezcan tener ventaja".
El preparador barcelonista se remitió también a las palabras de Schuster al término del partido de ida en la Copa del Rey entre ambos equipos (5-2), cuando el alemán pidió más dureza para frenar a Messi: "estábamos avisados, su entrenador ya dijo que había que dar patadas, todos lo hemos leído y al final, los datos son claros, ellos han cometido 23 faltas y nosotros 13".
A la hora de explicar la extraordinaria motivación del Getafe en el Camp Nou pese a no tener ningún objetivo deportivo, Rijkaard apuntó a "la mentalidad y ganas de su entrenador, sobre todo contra el Barcelona, quizá por ser un ex jugador, está transmitiendo esa agresividad contra nosotros, no sé si tiene algo que ver con el pasado". "Desde el primer minuto de juego se ha estado quejando del árbitro, por eso esta victoria aún da más satisfacción", valoró. El holandés también se mostró partidario de que los partidos de las dos últimas jornadas "se jueguen a la misma hora".
El preparador barcelonista se remitió también a las palabras de Schuster al término del partido de ida en la Copa del Rey entre ambos equipos (5-2), cuando el alemán pidió más dureza para frenar a Messi: "estábamos avisados, su entrenador ya dijo que había que dar patadas, todos lo hemos leído y al final, los datos son claros, ellos han cometido 23 faltas y nosotros 13".
A la hora de explicar la extraordinaria motivación del Getafe en el Camp Nou pese a no tener ningún objetivo deportivo, Rijkaard apuntó a "la mentalidad y ganas de su entrenador, sobre todo contra el Barcelona, quizá por ser un ex jugador, está transmitiendo esa agresividad contra nosotros, no sé si tiene algo que ver con el pasado". "Desde el primer minuto de juego se ha estado quejando del árbitro, por eso esta victoria aún da más satisfacción", valoró. El holandés también se mostró partidario de que los partidos de las dos últimas jornadas "se jueguen a la misma hora".