L D (EFE) "Seguramente, y con diferencia, ha sido el éxito más difícil de mi carrera. Como dicen aquí, respeto a todos los anteriores, desde el primer día me he sentido como un salmón, obligado a ir contra la corriente", afirma Capello en una entrevista que este martes publica el diario deportivo milanés La Gazzetta dello Sport.
Según Capello, gracias a sus colaboradores, "desde Baldini (secretario técnico madridista) a Galbiati, Tancredi y Neri (sus ayudantes), se logró construir un grupo que no existía, cumpliendo un verdadero milagro". "Tras el 3-2 con el Bayern, en la ida (Liga de Campeones de Europa), dije al presidente que si yo era la causa de todos los problemas, estaba dispuesto a irme. Él, en cambio, me dijo que se empieza y se termina con el mismo entrenador y seguimos adelante", apunta.
Sobre una presunta escasa relación con el presidente madridista, Ramón Calderón, dice: "No lo sé, preguntárselo a él. Sólo sé que me ha fichado para ganar y que hemos ganado, por lo que creo haber cumplido con mi deber". Capello no duda en calificar de "mentira absoluta" las noticias llegadas a Italia de un presunto litigio suyo con Calderón en la noche (domingo) de la consecución del título liguero.
De sus posibilidades de seguir al frente del Real Madrid la próxima campaña (tiene otros dos años de contrato), señala: "Es como lanzar una moneda al aire. Sólo sé que quiero seguir para ganar la Liga de Campeones. Ya he reservado un billete de avión para volver el 19 de julio, pues el 20 se inicia la concentración...". "Continuaría haciendo el salmón, pero si me marcharse me iría por la 'puerta grande', como dicen aquí", apunta.
Si no siguiese en el Real Madrid, Capello apunta que incluso podría dejar de entrenar: "Los equipos mejores ya tienen un entrenador, por lo que podría dejar de entrenar con dos años de antelación a lo previsto". Lo que tiene claro es que "nunca" iría al Barcelona: "No podría traicionar al Real Madrid. En la selección italiana está Donadoni, que lo está haciendo bien. Si acaso podría interesarme una selección extranjera con objetivos".
Capello dice haber recibido llamadas telefónicas de felicitación, entre otros, de integrantes de la familia Agnelli (propietaria del Juventus de Turín), de Dino Zoff, de Luciano Moggi y de Antonio Giraudo, estos dos últimos ex dirigentes juventinos inmersos en el caso de fraude deportivo que llevó al descenso del Juventus, así como la retirada de los dos títulos ligueros que Capello sigue viendo suyos.
Tras decirse "muy contento" de que el romanista Francesco Totti haya ganado la Bota de Oro 2007, considera que una Liga de Campeones vale más que un campeonato nacional ya que "tiene más resonancia mundial". "Con el Milán (campeón europeo) hay una diferencia, pues ya existía una estructura, mientras aquí (Real Madrid) había que construir todo", apunta. Capello, asimismo, considera al inglés Chelsea por "personalidad, cualidad y mentalidad" como el equipo más fuerte de Europa y no duda en calificar como "sólo un sueño" la posibilidad de que el brasileño milanista Kaká vaya al Real Madrid.