L D (Europa Press) A pesar de que ambas entidades han convocado públicamente la manifestación explicando su recorrido y horario –a partir de las 20 horas desde la plaza Universidad a la de Sant Jaume pasando por La Rambla–, no lo han comunicado debidamente a la Dirección General de la Policía de la Generalidad, por lo que ésta no ha autorizado la movilización y ésta la tratará como cualquier otra manifestación no comunicada.
Fuentes de la policía catalana explicaron que, además, según ha detectado la División de Información del Cuerpo, se prevé que entre los universitarios se infiltren jóvenes violentos anti-sistema habituales de otras movilizaciones similares y que pretenden enfrentarse físicamente a los agentes antidisturbios.
Tanto el Ayuntamiento de Barcelona como los Mossos d'Esquadra no permiten que ninguna manifestación discurra por La Rambla y en el caso de mañana no piensan hacer una excepción, como reiteró el alcalde, Jordi Hereu, y las mismas fuentes policiales.
De hecho, en las pocas ocasiones en que alguna movilización ha llegado a La Rambla siempre había sido autorizada previamente y era en casos que no suponían ningún riesgo para el mobiliario urbano, los escaparates o los transeúntes.
Por ello, en ningún caso mañana se permitirá que la manifestación entre en el distrito de Ciutat Vella si no es por la Via Laietana, como es habitual. No obstante, con toda probabilidad la policía tampoco dejará entrar a los manifestantes a la plaza Sant Jaume.
Fuentes de los organizadores de la manifestación explicaron que habrá un "servicio de orden" interno que intentará que los manifestantes vayan en un grupo compacto y que nadie haga "nada que no se haya preparado".
Debido al importante riesgo de confrontación entre los antidisturbios y los manifestantes violentos, la policía catalana también pide a la ciudadanía que, si puede, evite pasar entre las 20 y las 23 horas por La Rambla de Canaletes y la plaza Cataluña, o incluso la Via Laietana, donde pueden acabar llegando los incidentes.
Las mismas fuentes insistieron en que los peatones sean precavidos y utilicen el "sentido común" para alejarse de los disturbios y las carreras derivadas de las cargas policiales.
A los periodistas, la policía también les recomendó que actúen de forma sensata, intentando ver lo que pasa, pero sin entorpecer el trabajo policial ni entrometerse entre los antidisturbios y los manifestantes, como en alguna ocasión ocurrió el miércoles de la semana pasada.
Justamente este miércoles el Colegio de Periodistas de Cataluña mandó a los medios de comunicación un correo electrónico para ofrecer brazaletes identificativos –a la espera de un acuerdo definitivo con la Consejería de Interior– a todos los periodistas que se acrediten como tales.