Menú
Amando de Miguel

El prestigio del pre-

¿Alguien puede decir cuál es la diferencia real entre la “precampaña” electoral y la campaña electoral? Formalmente la primera es la que se realiza antes del tiempo legal previsto para la campaña. Pero esa campaña ilegal se parece extraordinariamente a la campaña propiamente dicha. El prefijo pre- soluciona el asunto.

Los deportistas recurren al “precalentamiento”, unos esparajismos para que se vea en la televisión que están dispuestos a competir, a jugar. Valdría mejor “calentamiento”, pero, otra vez, el prefijo concede un plus de interés. Un contrato es una cosa muy seria, por lo que conviene hacer antes un borrador, un documento provisional para revisarlo con cuidado. El papel adquiere así la dignidad de un “precontrato”.

Al razonar las condiciones o requisitos que permiten tal o cual efecto, la cosa se eleva a una categoría misteriosa si se llaman “prerrequisitos” o “precondiciones”. El prefijo da idea de que son elementos o factores previos, pero, como tal, resulta perfectamente inútil. Quizá sirva para alargar un poco las palabras. El polisilabismo es un signo de elegancia y a veces de nesciencia.

0
comentarios