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Florentino Pérez ha querido darle su particular bienvenida a Joan Laporta, como por otro lado haría cualquier amantísimo padre con su hijito el primer día de colegio, enseñándole a hacerse como Dios manda el nudo de corbata "Medio Windsor", una variación de aquel otro que pusiera de moda el duque de Windsor y que partía del típico nudo doble con aspecto triangular. Vamos que el presidente del Real Madrid le ha hecho "la picha un lío" al del Barcelona, para qué vamos a andarnos con zarandajas. El lunes por la noche le felicitaba por su victoria en un programa de la televisión autonómica, y el mismo martes por la tarde le dejaba sin David Beckham que había sido el principal motor de arranque de la candidatura que encabezó el ex líder de los "Elefant Blau". ¿No quieres caldo? ¡Pues toma dos tazas!... Cuando le preguntaron a F.P., con el joven Laportita allí sentadito dando esa imagen tan angelical de primera comunión, sobre si el Madrid había fichado al inglés, el sustituto de Gaspart suplicó "¡no lo digas aquí!". Aquello ya habría sido demasiado.

Laporta ha sido el principal daminificado por la contratación del chico de "Pepsi", aunque no el único. ¿Dónde andaba Jorge Valdano el día que un amigo íntimo de F.P. y el director de marketing del club cerraban en Cerdeña el fichaje de Beckham? Malo si sabía que la operación se estaba llevando a cabo porque entonces mintió descaradamente a todo el mundo. Peor aún si no tenía conocimiento de nada porque su sitio lo ocupó un directivo cercano al presidente. El caso es que esas dos opciones ("malo" y "peor") confluyen en una sola pregunta: ¿para qué necesita director deportivo un club en el que sólo se ficha por decisión personal del presidente?... Y por otro lado, ¿para qué necesita director deportivo un club en el que sólo se ficha por cuestiones extradeportivas?... La diferencia entre el nudo "Medio Windsor" que F.P. le descubrió a Laporta y el "four-in-hand" que le enseña a hacerse todos los días a Valdano es que el argentino además cobra por aprender.

El nudo gordiano de la cuestión es saber qué posición exacta ocupará Beckham sobre el terreno de juego. ¿Desplazará a Luis Figo hacia la izquierda? ¿Escoltará a Zinedine Zidane en el centro del campo? ¿Eclipsará definitivamente a Guti? Como ese tampoco es un problema suyo sino de Vicente del Bosque, supongo que Jorge Valdano dormirá como un niño esta noche. Y si el equipo no gana títulos, pues hala... ¡Se cambia al entrenador!


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