Saqué pocas conclusiones novedosas del duelo táctico entre el traductor de Bobby Robson y el ayudante de Alex Fergusson. Algún compañero con muchos años más de experiencia profesional a sus espaldas que yo (y me estoy refiriendo en concreto a Alfredo Relaño) extrajo una fundamental: el Real Madrid no se toma en serio la Liga y sí la Champions League. ¡Toma análisis certero!... Psicología de baratillo al margen, yo me quedo con la preocupación expresada por Radomir Antic en las páginas de El Mundo. Del serbio podrán decirse muchas cosas menos que no sepa de fútbol, y del partido de este miércoles en Portugal deduce que el Real lo seguirá pasando mal en defensa y que entre el centro del campo y Ronaldo existe una desconexión evidente. Es un hecho que el brasileño no atraviesa precisamente por su mejor momento de forma y que contra el Oporto goleó la "segunda línea" de Solari, Helguera o Zidane. ¿Dónde está Ronaldo?
El caso es que mientras el Real Madrid ganaba en Portugal, el Barcelona perdía ante un equipo desconocido en un "bolo" mejicano. Todo el mundo desea que el equipo azulgrana se reincorpore cuanto antes a sus quehaceres habituales y puje de nuevo por la Liga, pero si Carlos Queiroz no ha hecho otra cosa que limitarse a calcar los defectos y las virtudes del equipo que entrenaba Vicente del Bosque, Frank Rijkaard no tiene ni siquiera un "perfil" de equipo sobre el que podamos debatir. Por ejemplo, ¿dónde está Kluivert? Parece que el entrenador ha llegado a la conclusión de que el famoso "tridente" (Ronaldinho, Saviola y el citado Kluivert) no puede jugar al mismo tiempo. Y me parece que Rijkaard adoptará al respecto una "decisión política" dejando en el banquillo al "conejo" que, desde mi punto de vista, está en mejor forma que sus otros dos compañeros.
Quizás Kluivert, uno de los delanteros centro de mayor calidad técnica del mundo, no marque goles porque no aparezca nadie capaz de pasarle el balón en condiciones. Tampoco hace falta haber jugado en el Milán glorioso de Arrigo Sacchi para saber que el fútbol de ataque se "cocina" por las bandas. Y ahí viene otra duda más: ¿Por qué Rijkaard infrautiliza a Overmars y Quaresma? El primero es el último extremo nato vivo, mientras que del segundo se dice que es Luis Figo con veinte años. ¿Entonces? Si yo fuera Rijkaard rezaría para que no le fuera demasiado bien al Real Madrid en este inicio de temporada. Queiroz tiene aún notables claroscuros que solucionar en el juego colectivo de su equipo, pero a Rijkaard todavía no se le encendió la bombilla.
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