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Ignacio Villa

Un gobierno de Hipotecas

Con la llegada de Zapatero a La Moncloa hemos recuperado un viejo estílo de hacer Gobiernos, el estilo de la época González. Por lo que estamos viendo estos primeros días se acabó el "cuaderno azul" de Aznar. Es decir, nos tendremos que volver a acostumbrar al "pasen y vean", al baile de nombres y de quinielas, dicho de otra forma: un Gobierno por entregas y por fases. Rumores, confirmaciones y por supuesto filtraciones al diario El País; que, por cierto, es de lectura obligada para conocer las pulsaciones de la calle Ferraz.
 
Con todo, lo cierto es que el futuro jefe del Ejecutivo llega al poder con las hipotecas de viejas deudas que tiene que pagar y también con un buen ramillete de promesas electorales que ahora tiene encima de la mesa para cumplir. Zapatero que ha hecho una campaña de oposición se ha encontrado inesperadamente con el Gobierno, y por lo tanto con unos cuantos "brindis al sol" que ahora deberá explicar como los ejecuta o los deja olvidados.
 
En este baile de nombres y quinielas nos enteramos de que José Bono será el próximo ministro de Defensa. ¿En que quedamos?. La contundecia con que Zapatero dijo en campaña que Bono sería el ministro de Seguridad: ¿era un simple golpe de efecto o va a ser la tónica habitual a la hora de cumpilr sus promesas?. Si Bono va a Defensa, quizá Moratinos será el ministro de la Vivienda o Sebastián el de Exteriores.
 
Visto lo visto, lo dicho por Zapatero es papel mojado. Desde luego, sino cortan este "baile" de nombres al final casi todo el mundo se va a creer ministro de Zapatero; y más de uno se llevará un buen disgusto.
 
Pero además, de estas quinielas hay otras cuestiones de importancia. Como por ejemplo saber que cuota va a tener que pagar Rodríguez Zapatero al PSC.
¿Cuantos ministros socialistas catalanes habrá en el nuevo Ejecutivo Zapatero?. Esta presencia no será algo simbólica o testimonial, más bien lo contrario. Estos serán los encargados de vigilar los intereses del Tripartito catalán en Madrid; y por lo tanto pueden ser motivo de enfrentamientos en muy poco tiempo.
 
Pero, en fin, hay más hipotecas. Zapatero deberá formar un Gobierno paritario
(mitad hombres y mitad mujeres), e incluso también prometió que habría un amplio número de independientes. Por cierto: ¿recogerá el nuevo presidente algún felipista –véase Javier Solana– en su Gabinete? Lo dicho hipotecas no le faltan; estamos ante un gobierno que se va a convertir en un verdadero encaje de bolillos, de intereses y de facturas. Acertar no va a ser fácil.

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