Decía Zapatero el pasado martes que la campaña institucional “informativa” sobre el Referéndum de la Constitución Europea es aséptica. De aséptica tiene poco, pero además es rastrera y chusca al máximo.
Ya conocíamos que el Gobierno había decidido que una de las mejores formas de difundir los contenidos del nuevo Tratado Constitucional europeo era la "telebasura" del Gran Hermano; pero no contentos con eso ahora han decidido también recurrir a los folclóricos. Los Morancos o Los del Río son algunos de los encargados de difundir en Andalucía las maravillas del nuevo texto europeo. Una estrategia cuando menos simplona pero nada propia de un Gobierno serio.
El problema y el ridículo surge cuando los encargados de difundir las maravillas de la mal llamada Constitución europea reconocen que no se han leído el nuevo texto, y que van a votar "sí" porque así se lo han pedido los políticos. Menudo argumento de peso. Este Gobierno piensa que estamos en un país de pandereta y de populismo. Aquí no hay "Macarena" que valga, aquí hay improvisación a raudales y manipulación en estado puro.
Es, sin embargo, de agradecer la sinceridad de los "folclóricos". Los del Río han reconocido que dicen "sí" en el Referéndum porque así se lo ha pedido el Gobierno. No se las razones, pero esto suena un poco a tiempos pasados –muy lejanos– en los que en las consultas populares sólo había una respuesta. "sí o sí". Es evidente que no hay motivos para pensar que es una campaña aséptica.
Por cierto, ¿es esta la Europa que Zapatero quiere para España? Yo de esta Europa, sinceramente, me borro. Este Gobierno esta empeñado en cambiar el sistema constitucional que tenemos y, por lo que estamos viendo, está dispuesto a improvisar una construcción europea que de europea no tiene nada. Y eso que no ha hecho más que empezar la campaña.