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Thomas Sowell

Nunca nos darán tregua con las treguas

Los alto el fuego de la ONU son en última instancia decisiones pensadas para que quienes las toman, que no pagan ningún precio por las consecuencias de las mismas, se sientan bien consigo mismos.

¿Cuántos alto el fuego ha habido en Oriente Medio? ¿No será la cifra demasiado grande para recordarla? A lo largo del último medio siglo, en Oriente Medio habrá habido más alto el fuego que en todo el resto del mundo juntos.

¿Qué es lo que hará este último alto el fuego? Dará a Hezbolá un respiro de la respuesta israelí y le permitirá ganar tiempo para recibir nuevos cargamentos de equipamiento militar procedente de Irán, reconstruir su infraestructura militar, y prepararse para la próxima ronda de ataques contra Israel.

¿Por qué siguen repitiéndose estos absurdos escenarios de alto el fuego? Porque hay demasiadas personas, incluyendo a muchos de los que trabajan en los medios de comunicación, que se toman en serio a los corruptos portavoces de la ONU, de modo que nuestros líderes políticos tienen que actuar también como si se tomasen en serio a la ONU.

Esto es una charada muy cara. Entre sus costes se encuentran vidas humanas. Los alto el fuego de la ONU son en última instancia decisiones pensadas para que quienes las toman, que no pagan ningún precio por las consecuencias de las mismas, se sientan bien consigo mismos.

Nadie en su sano juicio se cree que o bien el ejército libanés o bien "los pacificadores" de la ONU van a desarmar a Hezbolá. El historial de ambos es virtualmente una garantía de que Hezbolá va a poder reanudar la guerra contra Israel en cualquier momento y lugar que le apetezca.

La mayoría no tiene idea de lo pequeño que es Israel y, por tanto, de lo vulnerable que sono todos y cada uno de sus ciudades y pueblos frente a los enemigos que lo rodean. New Hampshire se considera un estado pequeño, pero es más grande que Israel. Igual que otros 45 estados. El lago Erie es más grande que Israel, y el lago Michigan tiene casi el doble de tamaño.

Las ciudades de Oriente Medio de las que oímos hablar están muy próximas. Desde la capital de Israel en Jerusalén hasta Belén en territorio palestino apenas hay una fracción de la distancia que separa Washington de Baltimore.

La mayor parte de la gente está tan desinformada acerca de la historia de Oriente Medio como lo está de su geografía. Se supone, por ejemplo, que los judíos arrebataron la patria de los palestinos con el fin de crear el estado de Israel. Pero no existía ninguna patria palestina. Toda esa región pertenecía al Imperio Otomano hasta que el Imperio Otomano se desmembró tras su derrota en la Primera Guerra Mundial.

Cristianos, judíos y musulmanes, todos habían vivido durante siglos en Palestina. En el curso de la división del Imperio Otomano para crear naciones nuevas, los británicos apartaron una pequeña fracción para los judíos y, tras violentas objeciones por parte de los árabes, se resistieron durante años a dejar que éste pequeño trozo de tierra se convirtiera en nación independiente.

Los judíos vivían en Palestina mucho antes de que hubiera un estado de Israel e incluso antes de que hubiera Imperio Otomano. En 1939, Winston Churchill comentaba que los judíos "habían hecho florecer el desierto" en Palestina. La prosperidad resultante de la zona atrajo tanto a más judíos como a los árabes, incluyendo algunos árabes que más tarde afirmarían que los judíos les robaron su país.

Tras la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto, los judíos que buscaban refugio acudieron a su tierra prometida en Oriente Medio y se enfrentaron a los británicos para hacerse con el control y proclamar la independencia de Israel.

Ante la hostilidad y la violencia en los vecinos países árabes, los judíos abandonaron estos países y muchos fueron recibidos en Israel. Mientras tanto, los países árabes animaron a los árabes residentes en Israel a irse ante los ataques planeados de estos países con el objetivo de destruir al nuevo estado.

Fueron los árabes, no los israelíes, los que crearon un problema masivo de refugiados palestinos. Mientras los refugiados judíos eran absorbidos en la población general de Israel, los palestinos de los países árabes han sido retenidos en campamentos de refugiados durante generaciones bajo la promesa de un derecho de retorno que se haría efectivo después de que Israel fuera conquistado y los judíos desplazados.

Tras el fracaso más estrepitoso de todos los esfuerzos árabes por aniquilar a Israel en 1967, los israelíes tomaron el control de tierras de valor estratégico, como los Altos del Golán, con el fin de evitar que fueran utilizadas en futuros ataques militares.

En todos los años que estas tierras habían estado en manos de estados árabes, nadie las convirtió en estado palestino. Pero ahora se ha convertido en una causa fervorosa el forzar a Israel a crear un estado palestino que los propios árabes nunca crearon.

Ninguno de estos asuntos importa a aquellos de Oriente Medio consumidos por el odio o a aquellos en Occidente que quieren treguas para sentirse bien con ellos mismos sin molestarse en pararse a pensar en las consecuencias reales.

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