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Víctor Llano

Querella criminal contra Castro

La Audiencia Nacional ha demostrado que se considera autorizada para entender de crímenes que se perpetraron en otros países. Augusto Pinochet y Romeo Lucas García no causaron más sufrimiento que Fidel Castro.

Una querella criminal contra Castro Ruz y Osmani Cienfuegos fue presentada este 26 de febrero ante el Juzgado Central de Instrucción de la Audiencia Nacional. En la querella presentada por el Comité de Asistencia a la Disidencia-2506, se acusa a Castro y a Cienfuegos de ser los responsables de la muerte por asfixia de nueve prisioneros de guerra. Se aportan testimonios de varios testigos que presenciaron cómo murieron sus compañeros.

Las nueve víctimas (Alfredo J. Cervantes, José I. Macía del Monte, José Santos Millán Velasco, Hermilio B. Quintana Pereda, Santos Ramos Álvarez, Pedro Rojas Mir, Moisés Santana González, René Silva Soublete y José D. Vilarello Tabares) eran miembros de la Brigada 2506, cuyas fuerzas desembarcaron el 17 de abril de 1961 en las playas de Bahía de Cochinos con el propósito de liberar a Cuba de la tiranía y reestablecer la democracia.

Fracasaron. Los nueve combatientes asesinados fueron capturados y, junto a más de cien prisioneros, confinados en un furgón de transporte que tenía como destino La Habana. Nunca llegaron a la capital. Cienfuegos fue informado a tiempo de que si cerraban herméticamente el camión muchos de los prisioneros corrían el riesgo de morir asfixiados. Su respuesta fue la que se podía esperar de un asesino en serie: "No importa, de todas formas los vamos a fusilar. Así nos ahorramos las balas". Seguidamente ordenó que subieran al último herido al furgón: "Suban este cochino a la rastra".

En el curso del viaje de más de ocho horas, el intenso calor y la falta de oxígeno terminaron con la vida de nueve de los prisioneros. Otros muchos sufrieron graves lesiones y pérdida del conocimiento. El hecho de que a estos prisioneros se les haya violado los más básicos derechos humanos –derechos protegidos por las normas establecidas por la Convención de Ginebra y otros convenios internacionales– constituye un crimen contra estas personas y contra la humanidad.

A juicio de Juan R. López de la Cruz, sobreviviente del furgón y miembro del grupo CAD-2506, Cienfuegos es autor material de los crímenes y Fidel Castro autor intelectual. De la Cruz y sus compañeros piden en Madrid la justicia que no pueden pedir en su país. Y les sobran motivos. La Audiencia Nacional ha demostrado que se considera autorizada para entender de crímenes que se perpetraron en otros países. Augusto Pinochet y Romeo Lucas García no causaron más sufrimiento que Fidel Castro. No sabemos qué ocurrirá con la querella. Sólo nos queda esperar. Los cubanos siempre esperan por lo que nadie les ofrece.

Este martes a las 12:00, en la Fundación Hispano Cubana, el Comité de Asistencia a la Disidencia 2506 explicará por qué piden justicia en Madrid. Se proyectará el documental La rastra de la muerte.

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