Qué me lo digan a mí que de 12 no bajo ningún día.
Por eso me rio cada vez que hablan de conciliación familiar y laboral, de las 35 horas semanales. Ahora quieren jubilarnos a los 75 años pero ¿realmente creen que con este ritmo vamos a llegar?
Poco falta para que la esclavitud vuelva a ser legal, porque consentida ya está
Pues vale. Sabemos cuál es la jornada media. Pero no sabemos cuál es el tiempo de trabajo efectivo. Ni cuánto de este produce resultados eficaces. Ni cuántas veces el desperdicio de tiempo se debe a una falta de formación, información y medios para que los trabajadores puedan realizar eficazmente su trabajo. O a la falta de dirección profesional, en un país en el que se prima el mero hecho de acumular dinero con un negocio (pese a la incompetencia en la gestión) tanto como las relaciones personales en detrimento de la capacidad y los méritos. Ni cómo influye esa cultura en la que todo el mundo quiere ser “jefe” pensando que sólo consiste en dar voces a los subordinados y marear la perdiz tras calentar la barra de los bares, sin “dar problemas” a los de arriba, pasando por alto las incidencias en vez de solucionándolas. Que sigan las empresas y los departamentos de Recursos Humanos sin hacer una buena definición de puestos y perfiles, contratando a la gente “para todo”, sin especificar tareas ni funciones, desperdiciando talentos, sin valorar formación y experiencia. Y que siga sin tenerse en cuenta ni medirse la responsabilidad del “empresario” en todo esto, que seguramente así salgamos de la crisis. En el año 2.300, más o menos.