Los gemelos de Birmania, Johnny y Luther Htoo cambian sus fusiles por lápices

Los gemelos Johnny y Luther Htoo los dos "niños terribles" de las junglas de Birmania y líderes hasta hace poco de la guerrilla insurgente Ejército de Dios, cambiarán sus fusiles automáticos por lápices y cuadernos de la escuela. Los chicos hambrientos y cansados de librar batallas en la selvas, se entregaron la pasada semana a las autoridades de Tailandia.

"La vida es mejor aquí que en la jungla", apuntó Luther en el centro de detención donde, con su hermano, se encuentra recluido a la espera de que Tailandia decida darles asilo por motivos humanitarios. Asimismo, aseguró que sus días al frente de la guerrilla han concluido y se mostró ansioso por reunirse con sus padres, quienes al igual que otros 130.000 miembros de la tribu Karen habitan en campos de refugiados situados a lo largo de la frontera tailandesa. "Queremos ir con nuestros padres y reiniciar los estudios", señaló.

Johnny y Luther, que dicen tener 14 años, se convirtieron en leyenda cuando en 1997 sus guerrilleros repelieron la ofensiva lanzada por las tropas del Ejército de Birmania contra remotas aldeas de campesinos. "Fue Dios el que nos envío a ser líderes de la lucha contra los soldados birmanos, por eso hemos disfrutado al combatirlos", dijo Luther tras reconocer que mató a numerosos enemigos.

El "Ejército de Dios" era hasta la rendición de sus dos líderes, un movimiento de inspiración cristiana que se separó el 4 de enero de 1997 de la Unión Nacional Karen (UNK), el mayor grupo armado del este de Birmania, por discrepancias con el entonces jefe, el general Bo Mya. Los hermanos Htoo, que en su unidad tenían los rangos de coroneles, eran venerados por sus seguidores, que les atribuían poderes sobrenaturales por tener la lengua oscura, una creencia que fue negada por Luther "No tenemos ningún poder mágico. Si Dios no nos hubiera ayudado, todos estaríamos ahora muertos", señaló el ex líder de los birmanos.

Unos 3,4 millones de personas componen la etnia Karen, mayoritariamente de religión cristiana y que combate desde hace 54 años por la autonomía de sus tierras, ricas en recursos naturales y situadas en el extremo oeste de Birmania.