La decisión del Ayuntamiento de Madrid de no autorizar ningún tipo de actuación musical durante las fiestas del Orgullo Gay en Chueca, no ha gustado a algunos colectivos de la capital. Así decidieron hacérselo saber al alcalde Alberto Ruiz Gallardón, y este lunes se convocó una cacerolada a través de Facebook para protestar contra esta decisión. Otro objeto de sus iras ha sido la Asociación de vecinos que se ha mantenido muy crítica con las fiestas de Chueca, y han luchado por impedir el impacto ambiental y los problemas de seguridad.
Como informa Europa Press, los ‘indignados’ que se manifestaron este lunes portaban pancartas con lemas como "no nos representan" y "sois Chueca", y han escenificado su rechazo a la prohibición municipal, alegando que "cualquier fiesta popular española -las Fallas, los San Fermines, San Juan, los Carnavales o La Tomatina por citar algunos ejemplos- implica inconvenientes como el ruido y la suciedad y, sin embargo, están promovidos por los ayuntamientos de sus ciudades e incluso tienen el carácter de Fiesta de Interés Turístico Internacional", según reza la convocatoria.
Alberto, atrapado en la manifestación
Una vez terminó la protesta de la cacerolada en la plaza de Chueca, un grupo de unos 50 manifestantes avanzó a la plaza de Alonso Martínez, cerca del domicilio de Ruiz Gallardón. Allí se quedaron esperando hasta que salió, para abucherale. El alcalde esperó en el portal de su casa junto a su mujer la llegada de la Policía antes de salir a la calle a pasear al perro. El matrimonio intentó caminar junto a la mascota de manera normal, pero las decenas de ‘indignados’ les siguieron persiguiendo, increpándole directamente. La Policía llegó a cortar calles aledañas.
Gallardón intentó hablar con los manifestantes, a quien acabó pidiéndoles respeto, y que dejaran de gritar delante de su domicilio: "Aquí viven mi mujer y mis hijos" les dijo el alcalde, "Hacerle esto a mi mujer y mis hijos no es de justicia" aseguró, como recogen los vídeos filmados por los propios 'indignados'.
"Mi despacho está siempre abierto para vosotros. Venid", les ofrecía a renglón seguido, sin que los manifestantes le dejaran terminar la frase, abucheándole y llamándole 'mentiroso', mientras gritaban consignas como 'Gallardón, dimisión' o 'Es de Chueca, el orgullo'.
Después, según refleja un vídeo del suceso al que ha tenido acceso Europa Press, los manifestantes continuaron persiguiendo a Gallardón y a su mujer durante otro tramo, hasta que la Policía Municipal se lo llevó escoltado.
Los organizadores del Orgullo se desvinculan
Las tres entidades organizadoras del Orgullo Gay (Aegal, Cogam y FELGTB) se han desvinculado este martes de esta 'cacerolada' y han condenado la forma en la que se produjo esa protesta, pidiendo a los ciudadanos "serenidad".
Ante estos sucesos, los convocantes del Orgullo han agradecido el apoyo a las convocatorias musicales que el MADO programa de forma habitual en la plaza de Chueca y han celebrado "la unidad que despierta la defensa de las fiestas".
Sin embargo, han subrayado que las "actitudes" que se vieron después con respecto al primer edil (con quien MADO sigue intentando negociar un cambio en la autorización sobre la plaza de Chueca) "no coinciden con la forma de lucha" de dichas asociaciones, que previamente ya se habían desvinculado de la convocatoria.
"Las asociaciones que trabajan en el Orgullo apuestan por el diálogo como principal herramienta de reivindicación y, por tanto, rechazan estos comportamientos. El respeto y el diálogo sereno y pacífico han sido siempre una máxima de la actuación de los activistas LGTB, y la reacción de unos pocos no puede imponerse al diálogo sereno que en este y en otros ámbitos hemos desarrollado siempre", añaden.
Por ello, han hecho un "llamamiento a la serenidad y a la calma" ante un proceso de negociación "duro por las restricciones que quieren imponerse" pero que, a su juicio, "aún se encuentra abierto", y han insistido en que "cualquier acto de protesta reivindicativa debe desarrollarse siempre de forma pacífica".