Cuenta El Mundo que el cerebro de la SGAE, que se llama José Luis Rodríguez Neri, tiene una boquita que ya, ya. "Toda la pasta que ha metido Industria en la SGAE es una puta mentira", decía en una conversación. Vaya con los culturetas, qué lengua, habría que lavársela con jabón. Pedro J. apunta directamente a Sinde, que le ha tocado la china en esta historia. "Cabe pensar incluso que más que negligencia ha podido haber complicidad. Y es que varios responsables del Ministerio son ex trabajadores de la SGAE". Uy qué fea se pone la cosa.
Pedro J. también se echa las manos a la cabeza con Rubalcaba. "Resulta tragicómico que el vicepresidente del Gobierno que más puestos de trabajo ha destruido en la historia de España –ahí es nada- pretenda convencernos ahora de que ha mantenido en secreto la solución que hubiera salvado a su partido de la última debacle electoral (...) Parece una patética burla".
Y Raúl del Pozo sale a degüello a defender a Pajín de los "chistes sobre su cuerpo nada gitano, ni tampoco de sirena". Y es que a quién se le ocurre ser ministra, prohibir los bollos, tener algún kilito de más y ponerse en bikini. Es "una mujer normal, no un bollycao y tampoco una foca". Pero tras la foto que publicó ayer El Mundo "tronó la sátira en las radios y en las redes sociales" que le han pillado vicio a eso de "putear a esta ministra". Vamos, que a la pobre le ha tocado "el papel de bruja" y "en otro tiempo hubiera sido puesta en la parrilla como un filete de vaca". ¿No podría haberse ahorrado la comparación?
Pajín también es la protagonista hoy de la portada de La Razón que saca a la ministra bostezando mientras pasea por Menorca. No es para menos, porque se ha ido de vacaciones con sus papis a una residencia para funcionarios en un islote de la isla de Menorca. ¿Se imaginan algo más aburrido? Pues José Antonio Vara está verde de envidia. "Por algo es ella la señora ministra y nosotros, simples ciudadanos sin cargo ni coche oficial alguno" y no podemos irnos de vacaciones a una isla de funcionarios con nuestros padres, que es la juerga padre.
El periódico de Planeta viene hoy muy veraniego y cuenta que Bono la ha armado en el Congreso prohibiendo la manga corta, los tirantes y las bermudas. Y es que el listillo ha decidido que sean los funcionarios los que les digan a los ministros y diputados, ‘fuera, aquí no se puede entrar con esa pinta’. Los trabajadores han dicho que nanai de la china, que "ellos no son guardianes de nadie y que, entre sus funciones, no está el estilismo". Qué se lo diga él.
El País está con la mosca detrás de la oreja desde que "el PSOE asume como estrategia un giro contra los bancos" dirigido "a los votantes de izquierdas que han abandonado el PSOE en los últimos meses". Así que ha preguntado a los banqueros qué les parece que a Rubalcaba le haya dado por darles estopa hasta en el carné de identidad. El resultado es que a los ejecutivos les "están sentando mal las recientes críticas" pero "la banca no se siente aludida porque no recibe ayudas". Ah, mira, qué buen carácter tiene la banca. ¿No será por aquello de que siempre gana y Rubalcaba lo sabe también?
En ABC, Tomás Cuesta se dedica a deprimir a la izquierda. Dice que es "un navío fantasma, un buque derrelicto, un esquife ambidiestro. Vamos, que quién la ha visto y quién la ve: espectro gemebundo que equivocó la senda". Y el manifiesto de la zeja, es "un bodrio de chorreras utópicas y tufos arcangélicos". Mal, muy mal.
La Gaceta no se resiste e ilustra su portada con un bofetón en la cara de Rubalcaba en forma de foto dándose un pedazo de abrazo con Teddy, de esos que se dan los hombres, con palmadas y todo. "Ante la atenta mirada de Zapatero, Rubalcaba y Teddy Bautista sellaron su amistad y afinidad ideológica en un fuerte abrazo", un "apretado abrazo de amistad" en 2006. Son amigos, son amigos.
Y como la SGAE cae tan rematadamente mal y no se libra ni Dios, en Público Manuel Saco le atiza de lo lindo, como solo sabe Saco, a "el tal Calamaro". "Aquel que dijo abdicar de la izquierda porque ésta defendía la prohibición de la tauromaquia en Catalunya, ha dado un paso más en su carrera hacia el desahucio" por comparar lo de la SGAE con el 23-F. "Lo fácil sería que comparara ahora lo suyo con Gardel, pero yo soy todo un caballero". Saco, déjate de monsergas. Cuenta, cuenta.