El Mundo está eufórico, exultante con el procesamiento de los polis del chivatazo a ETA. Y no es para menos, porque cuenta lo desamparado que se ha sentido desde que en 2006 "destapó" el caso del chivatazo y "se produjo la soledad mediática más absoluta", no encontraba "a nadie en la prensa" que le hiciera caso. Pero entonces llegó el juez Marlaska, "el incorruptible" que levantó el caso hasta que volvió Garzón y "se paralizó". Dice a lo largo de siete páginas que la investigación se ha "desarrollado con el cuchillo entre los dientes" y "las patadas entre las diversas familias policiales han sido tremendas". Y mientras todo esto pasaba, Rubalcaba respondía a la "cacería parlamentaria (...) desacreditando psicológicamente a su adversario" haciéndolo pasar por "un fanático, un loco", dice en referencia a Gil Lázaro, el pobre. Así que ahora los populares "están que ni se lo creen", qué suerte, qué puntazo.
Pedro J. está que no cabe en sí de gozo con un auto que es la "reconstrucción minuciosa de la ignominia", acusa a Garzón de "una desidia rayana en la complicidad con los imputados" y dice que es "obvio" que hay responsabilidades políticas. O sea, Camacho "debe dimitir" y Rubalcaba, que "ha obstaculizado la investigación con todo tipo de artimañas, renunciar a ser candidato" por su "impresentable conducta". Apostamos a que no se verán satisfechos sus deseos.
Pero si El Mundo está contento, ni les cuento La Gaceta. Está como un niño con zapatos nuevos porque "ayer adelantó en exclusiva" el procesamiento de la cúpula policial de Interior. Carlos Dávila señala que "la exclusiva de ayer de La Gaceta se ha confirmado plenamente", El Brillante de Dan que hablar recuerda que "como adelantó La Gaceta" y en el editorial se comenta que "la noticia del procesamiento la adelantó La Gaceta, que junto con Intereconomía TV ha informado durante los últimos años sobre el Faisán", contradiciendo los lamentos de El Mundo por su soledad informativa. Y ya en el interior, da cuenta de que "como adelantó en exclusiva La Gaceta", Ruz ha procesado a los polis del chivatazo. Felicidades, felicidades, enhorabuena...
El País relega el tema a una columnita en portada, tanta escandalera de la derecha mediática, córcholis. Y el juez "acusa", nada de procesa, por el "presunto chivatazo". Y es que Ruz no sale muy bien parado, como era de esperar. "El juez sostiene que hay indicios para acusar de tales delitos a tres mandos dedicados a la lucha contra ETA", cómo se atreve, en qué cabeza cabe, viene a decir. José Yoldi hace un pormenorizado análisis del caso, en el que dice que no hay "nada nuevo bajo el sol", solo una cosilla, que coincide con la toma de posesión de Antonio Camacho como ministro de Interior, "lo que no parece casual". Ay, ay, que aquí hay gato encerrado. Yoldi está alucinado, es que no entiende nada. "Para Ruz, avisar a un enlace de ETA de que miembros de la red de extorsión iban a ser detenidos, aunque sea con la finalidad de no entorpecer las negociaciones entre el Estado –que no el Gobierno- y la banda terrorista y de acabar con la violencia en Euskadi, constituye un delito de colaboración". Qué barbaridad, cómo es posible, avisar a ETA un delito, si era con buenas intenciones, caramba. "Todo lo más, se perseguía acabar con la violencia en Euskadi. Hay una sutil diferencia". Este juez es que es un exagerado.
Menos mal que Ruz encuentra consuelo en La Razón, que se deshace en elogios al "trabajo de un juez profesional que ha dirigido con pulso firme una instrucción de enorme complejidad y repercusión pese al legado de Garzón, que frenó la causa todo lo que pudo y con el criterio siempre discrepante de la Fiscalía, y por consiguiente del propio Gobierno".
Pero también habla del "estupor" que causa que otro juez, Pedraz, "haya puesto en libertad a Iñaki de Rentería" –el que ordenó el secuestro de Ortega Lara- "por no haber riesgo de fuga". Otro que se pira, y si no al tiempo. "En el colmo del trágico esperpento, ha logrado la libertad gracias a su abogada, que ayer fue detenida por su presunta relación con los tres zulos de ETA". Pues sí que es curioso, sí. Menudo cabreo tendrá la abogada.
En ABC, Blanca Torquemada habla de la sesión de control al Gobierno, donde ya "solo caben fuegos fatuos o melonadas" y solo "dan la talla Salgado y Soraya mientras a su alrededor menguaba lo demás incluido el cunero por Cádiz. Y eso que aún no le habían coceado el juez Ruz y Felipe González".
Y Público tiene un episodio de Camps, "paradigma del cinismo político" (Marco Schwartz), que dice ahora que le regalaron los trajes en calidad de líder del PP, no por ser president, así que tiene poco sitio para chivatazos . Pedro Águeda se hace la pregunta que es la madre del cordero. "¿Tiene sentido que quien ha destinado toda su vida profesional a combatir a la banda, que ha enterrado a amigos suyos víctimas de los terroristas, decida avisar a los miembros de una red de extorsión de ETA de que van a ser detenidos por otros policías?". Ay, hijo, a ver si leemos más, en otros periódicos tienen una respuesta.