El Mundo está totalmente en contra del impuesto del Patrimonio que quiere reinstaurar Rubalcaba para castigar a los ricos. "Es un impuesto confiscatorio y el PP obra correctamente cuando se opone a su reimplantación". Pedro J. no se resiste a tirarle pullitas a El País por su interminable entrevista a Rubalcaba este domingo. "Rubalcaba va a necesitar muchas páginas de periódico para convencer a los ciudadanos". Tampoco a Federico Jiménez Losantos le ha caído bien el nuevo-viejo impuesto. "Es un vergonzoso atraco ilegal porque grava dos veces el mismo bien" y además "favorece a los más vagos y a los más ricos. Unos, porque gastan y no dejan poco; otros porque guardan sus bienes lejos del Fisco".
La Gaceta se lleva las manos a la cabeza con la Diada. "En la calle y a plena luz del día" un "grupo de exaltados independentistas prendió fuego a una bandera española y a un retrato del Rey". Oye, pues a mí me suena de algo. Y esa misma sensación debe tener Carlos Dávila porque le produce "hartazgo" y "hastío". Y a Pomerol ni les cuento, le ha inspirado una historia de terror. "Esos chicos que visten de negro, tan siniestros (...) chicos enfermizos, trastornados por un odio inexplicable".
Para La Razón el cuento de terror es el impuesto para ricos de Rubalcaba. "La resurrección de un cadáver", ahí es nada. Y es que al candidato socialista le ha dado fuerte con los "guiños a la izquierda y a los indignados" y vive en un sinvivir. Ya lo dice José María Marco. "Así se explica el cariz marginal de la campaña de Rubalcaba, sus eslóganes contra los ricos, su perpetuo balbuceo entre la demagogia infantilista y la invocación del deber".
En ABC, Curri Valenzuela va "en busca del líder maduro" y nos da a elegir entre Rajoy y Rubalcaba. El primero "goza de una salud de hierro" mientras que el socialista tiene "problemas de corazón" y ¡alergia al anisakis! Así que ustedes verán. Eso sí, tienen algo en común: "los dos llevan barba, con canas". Pues qué dilema entonces...
El País lleva una encuesta de voto y nada, que "El PP consolida su ventaja con una mayoría absoluta holgada". Aunque se ha hecho un lío tremendo con las respuestas. Es que no lo entiende y no lo entiende. Resulta que la mayoría apoya todas las propuestas de Rubalcaba (impuesto del patrimonio, impuesto a los bancos) pero hete aquí que "la mayoría es partidaria de equilibrar las cuentas públicas con ajustes en gastos de la administración, más que con subidas de impuestos". El "problema" para El País es que "al mismo tiempo, la mayoría cree que esos recortes, que anticipan lo que hará el PP si gana, reducirán la calidad de servicios sociales, educación y sanidad". ¿Por qué votan entonces al PP? Están locos estos españoles, que diría Obelix. Ya se lo advierte su columnista Jose María Ruiz Soroa: "Hablar de los ricos y sus impuestos es muy complicado".
En Público, Manuel Rico se rebota hoy contra "la derecha española" porque "sigue atizando la catalanofobia", y sin comerlo ni beberlo les llegan las tortas a "gentes como José Bono o Paco Vázquez que han hecho carrera en el PSOE" por sus "ataques a la identidad de Catalunya". Y mientras, Isaac Rosa se teme lo peor con la huelga de profes por esos "mensajes maliciosos" que lanzan algunos, tales como que tienen trabajo de por vida, echan pocas horas o tienen muchas vacaciones. Es que los hay malignos. Así que pide a los padres que no se rajen y se unan "en defensa de los profesores" porque "no se habla de sus condiciones laborales", qué va, sino del "sistema educativo". "Debemos ver el conflicto como una trinchera". Ah, bueno, siendo así, la cosa cambia un montón.