Gallardón ha defendido las medidas tomadas para la reforma de la Justicia que ha emprendido, para lo que ha echado mano de una crítica de un socialista que lo acusó de hacer "una contrarreforma". "Es exactamente eso" aclaró, "lo que estamos haciendo es devolver el espíritu de la Constitución a las leyes, que fueron reformadas unilateralmente por el PSOE".
Ley del aborto: "El derecho a la vida es lo más progresista"
En lo referente a la modificación de la Ley del aborto, Alberto Ruiz-Gallardón ha asegurado que la intención del Gobierno es "ir donde el Tribunal Constitucional nos dijo que teníamos que estar" en cuya sentencia estableció que "la despenalización no podía suponer la desprotección de los derechos del no nacido, reconocidos por la Constitución". El ministro considera que el "el PSOE obvió esa protección" e hizo algo que "a nuestro juicio fue un error, y es que no se puede entender que un menor de edad tenga que pedirle permiso a sus padres para hacerse un piercing o un tatuaje y no para abortar", explicó.
Además, negó que personalmente haya cambiado de postura con respecto al aborto. "Sobre este asunto hay hemerotecas, el TC ya ha dicho como hay que interpretar el derecho a la vida" y yo "siempre he defendido el derecho a la vida. Defender el derecho a la vida es lo más progresista" aseveró el titular de Justicia. Además, señaló que en "los supuestos en los que el legislador entienda que no hay reproche penal, podrá interrumpirse el embarazo".
Matrimonio homosexual: lo que diga el TC
Sobre el matrimonio homosexual, Gallardón aseguró que "mi criterio es que tenemos que esperar. Que estemos a lo que diga el Constitucional, si la fórmula vigente es que cabe en la Constitución, la dejaremos". Preguntado por su opinión personal, el ministro evitó pronunciarse "tengo una opinión de la ley, pero una vez que el partido ha comprometido su postura a lo que diga el TC, tenemos que estar a lo que diga el Tribunal", aclaró.
Prisión permanente revisable: "No es cadena perpetua"
Otro asunto sobre el que versó la entrevista fue la prisión permanente revisable. "Es incompatible con la cadena perpetua, por eso se llama permanente" aseguró el titular de Justicia. Hasta ahora, según dijo, existía el riesgo de que cumplidos los años de condena no se cumpliera "el objetivo último de la prisión, que es la rehabilitación, sin riesgo para nuevas víctimas". Precisamente para paliar esta deficiencia se ha modificado la ley, para que "se condicione el número de años al cumplimiento de la rehabilitación, que será estimado por los organismos pertinentes, no sólo por el análisis de la voluntad del reo", para poder asegurarse de que el preso "no es un riesgo para la sociedad, podrá reinsertarse en ella".
Esto será aplicable en "delitos muy concretos, no sólo de alarma social, sino en aquellos que entrañen un riesgo para la sociedad si la persona no ha sido rehabilitada y va a volver a matar" explicó Gallardón "a eso quedará supeditada la puesta en libertad: si no se constata la rehabilitación, no se concede la libertad". A tenor de lo cual que "lo perpetuo es incompatible con esta reforma, que no está condicionada a los años, sino a la rehabilitación" especialmente en delitos que "al margen de su naturaleza política constaten un riesgo para la sociedad" como ocurre en Francia con los relativos al terrorismo.
Jurado popular y renovación del TC
Sobre el jurado popular, Gallardón aseguró que es necesaria una "reflexión, sobre esta figura en la que llevamos unos años de experiencia, debemos reflexionar sobre qué delitos deben ser juzgados y cuáles no" expresó.
Respecto a la renovación del Tribunal Constitucional, el exalcalde de Madrid aseguró que el PP está a la espera de que el PSOE designe un interlocutor válido para llevarla a término. Además, añadió que "a mí me gustaría que no hubiera un reparto de miembros según los votos obtenidos por los partidos" sino que su deseo sería que "todos nos pusiéramos de acuerdo" en los nombramientos.
El logo de la discordia y Ana Botella
Gallardón también tuvo tiempo de valorar las primeras medidas de su sucesora en la alcaldía de Madrid, Ana Botella. "Me gusta todo lo que está haciendo" dijo, contundente. Además, defendió a la edil madrileña de las críticas recibidas: "Tienen un contenido machista importante. No por nada, sino por ser mujer de quien era, pero los hechos lo van a desmentir" vaticinó.
Sobre la polémica por el logo de la candidatura de Madrid a los Juegos Olímpicos, el ministro de Justicia consideró que "la política es buena para el logo porque así se habla más de él, y se conoce", dando a entender que le gusta el diseño.