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Nace el segundo bebé-medicamento para salvar a su hermano

La niña se someterá a un trasplante de células.

Mesozoic dijo el día 17 de Febrero de 2012 a las 11:48:

Sí, más o menos es eso. También puede ser que la madre coja un virus o una bacteria, se transmita por la placenta al bebé y haya complicaciones, pero en principio y que yo sepa una malformación no provoca infecciones, ya que son cosas distintas: Una malformación es un error congénito en la formación del nuevo ser, y una infección fetal es el acceso por alguna vía al feto por parte de agentes patógenos. Es un poco lo que una caries a un quiste interno. Una caries es una infección procedente del exterior y un quiste se ha originado por algún error del propio cuerpo, pero no tienen nada que ver el uno con el otro.
No sé qué historia le habrán contado los médicos o los familiares a nuestro amigo, lo que sí creo es que la mujer fallecida lo único que tuvo fue una terrible mala suerte

punt dijo el día 17 de Febrero de 2012 a las 11:12:

[Mesozoic] De nuevo muchísimas gracias por sus aclaraciones.

Puesto que procuro siempre hacer una defensa razonada y no dogmática de la vida (no es que no exista esa defensa dogmática: es que la defensa dogmática de la vida atañe al ámbito de la moral, de modo que ese tipo de argumentos sólo pueden convencer y vincular a quienes profesen esa moral), toda la información que me permita perfilar mejor y afianzar con mayor solidez argumental esta defensa (que necesariamente debe apoyarse en la más estricta realidad) me resulta inestimable. A ello me están ayudando notablemente sus aclaraciones que, si bien no desmontan realmente ninguno de los puntos fundamentales del esquema argumental que tengo construido, sí me obligan a corregir y ampliar algunos de ellos.

Desde luego, hay muchos médicos de verdad que explican las cosas como son y que actúan honradamente hacia las madres, pero desgraciadamente hay también muchos que se hacen llamar médicos pero que, mediante una información defectuosa, entre sesgada y directamente falsa, y obedeciendo a intereses alejados de sus juramentos hipocráticos, mueven a muchas mujeres a cometer actos gravísimos, induciéndolas mediante engaño a creer que están en un peligro de mucha mayor gravedad que el que existe en realidad.

Así pues, este parece que debió ser el caso del médico que asesoró a la mujer de quien se nos relataba que falleció por infección en el embarazo:

- En el cuarto mes, el médico le había avisado falsamente de que la probable malformación de su hijo podía hacer peligrar la vida de la madre (cuando hablo de falsamente no me refiero a que no se hubiera detectado la malformación, sino a que el médico informó de que eso ponía en peligro la vida de la madre, no siendo así)

- Meses después, en el séptimo de embarazo, llegó una aparente confirmación de dicho vaticinio, ya que se produjo una infección que condujo a la muerte de la madre.

- En realidad, analizado el caso fríamente, parece bastante claro que esa confirmación no es tal puesto que el origen de la infección no puede estar en la malformación del hijo sino en un problema bastante común y que se presenta en todo tipo de embarazos con cierta frecuencia, cual es la rotura del saco amniótico, seguida de la falta de una adecuada atención médica (bien por un mal diagnóstico, bien por una atención negligente tras el mismo).

En fin, espero haberlo entendido ya correctamente. Una vez más, muchísimas gracias.

Un saludo.

Mesozoic dijo el día 16 de Febrero de 2012 a las 18:54:

Sr. Punt, son cosas que nada tienen que ver.
Las malformaciones que pueda llevar un feto pueden ser letales para el mismo o no, pero a veces no tiene nada que ver. A veces incluso no hay causa aparente por la muerte de un bebé dentro de la tripa, un niño puede estar perfectamente sano y que se le pare el corazoncito u otras cosas que tampoco viene al caso explicar, ya que son cosas dolorosas y tristes.
Lo que sí que es verdad, y esto lo puedo decir ya que lo he vivido en familiares cercanos, es que un bebé puede estar bastante tiempo fallecido dentro de la madre sin que ésta lo sepa y sin que el cuerpo lo expulse de inmediato, sobre todo si ha alcanzado cierto desarrollo.
Además, el bebé está envuelto en el saco amniótico, más el líquido y el tapón mucoso que lo aíslan de cualquier ataque infeccioso. Por lo tanto, un bebé puede tirarse 15 días dentro de la madre estando muerto y la madre ni enterarse. Por eso las que estamos embarazadas estamos tan pendientes de cuánto, cuándo y cómo se mueven nuestros bebés, porque sus movimientos nos da señales de su estado.
A veces por error médico cuando se rompe la bolsa se confunde con otra cosa y mandan a la madre para casa, y eso es lo peligroso.

punt dijo el día 16 de Febrero de 2012 a las 14:49:

[Mesozoic] Le agradezco enormemente la aclaración, ya que como hombre (a quien las cuestiones relativas al embarazo no afectan directamente) que no se dedica a la medicina (por mucho que suela tener interés en disponer de un conocimiento suficiente como para poder actuar en un momento dado con cierta autonomía y conocimiento de causa), mi información al respecto debe tener necesariamente lagunas que conviene rellenar.

De hecho, esta mañana me rondaba vagamente por la cabeza la idea de que había cometido ese error solo que, como mucho, alcanzaba a preguntarme: ¿En serio puede un médico diagnosticar en el cuarto mes que va a producirse necesariamente un desenlace fatal tres meses después? ¿No provienen las infecciones de agentes infecciosos, cosa que el hijo, malformado o no, no es? Dado que una infección como la que se describe tiene toda al pinta de ser una septicemia... ¿Puede una malformación de un hijo, por el hecho de serlo, derivar en septicemia? ¿Cómo?

Como le digo, ya estaba yo haciéndome las preguntas pero aún no había encontrado las respuestas, de modo que le agradezco enormemente su esclarecedora aclaración, de la que tomo buena nota.

Aun así, creo que tal vez exista una explicación alternativa a la sucesión de hechos que vd relata (rotura de la bolsa amniótica y subsiguiente septicemia, análoga a las "fiebres puerperales" que se producen cuando, tras el parto, no se retiran todos los restos de membrana):

¿Podría haber sucedido que, tras morir el feto, por alguna razón el cuerpo de la madre no lo haya expulsado de forma natural? Si tal fuera el caso, el cadáver no expulsado podría haber devenido fácilmente en refugio de infecciones, como sucede cuando se presenta una gangrena.

Pero no me termina de cuadrar: no termino de ver cómo el médico puede haber visto razones para pensar que la eventual muerte del feto tenía por qué no derivar en su expulsión natural, o por qué pudo suponer que la medicina no tendría modo de proteger a la madre llegado el caso.

Sea como sea, debo entender que la mujer fallecida tomó realmente su decisión "a vida o muerte" puesto que, independientemente de su situación objetiva y según se nos ha relatado el caso, el médico le había planteado su situación en esos términos tan drásticos.

Un saludo.

Mesozoic dijo el día 16 de Febrero de 2012 a las 10:26:

Punt, le aclaro una cuestión, simplemente añadir un pequeño "extra" a su exposición, que me parece meridiana. A saber:

Lo que cuenta nuestro amigo Pelorat acerca de su amiga muerta, es ciertamente muy triste. Pero el hecho de que la mujer haya muerto por una infección causada por un feto que traía malformaciones, como si la causa de la infección fuera el feto y todavía más sus malformaciones, como si el niño quisiera matar a la madre. Esto es una falacia.
El niño traería malformaciones, sí, y su madre fue muy valiente al decidir no abortar. Seguramente tiempo después de conocer las malformaciones, la bolsa que envolvería al bebé se rompería, se infectaría, mataría al bebé y luego esa infección se transmitiría a la madre provocándole la muerte. Lo digo porque cuando estaba embarazada de mi hija mayor, me pasó algo similar y me tuvieron que medicar de inmediato para evitar las infecciones y seguidamente provocarme el parto.
Pero usted lo enfoca como que por culpa de las malformaciones la madre murió, y siento decirle que probablemente no tuvo nada que ver. La rotura de la bolsa amniótica es una cosa bastante corriente, sabe usted?
Y decir que si hubiese abortado su amiga estaría viva, bueno, sí o no, eso es como afirmar que si no me hubiese sacado el carnet de conducir, no hubiese tenido tal o cual accidente...De todas maneras hay mujeres que mueren abortando, es una operación seria con riesgos al igual que un embarazo y un parto, y desde luego en un aborto hay alguien que muere seguro, no como un embarazo o un parto, en el que seguramente todos salen vivos...

punt dijo el día 15 de Febrero de 2012 a las 12:15:

(SIGUE)

Por lo demás, la hipocresía de algunos no conlleva la verdad o falsedad de lo que antes hubieran dicho. Si alguien declara que no se debe robar y luego roba... ¿Será entonces lícito el robo? Procure, pues, juzgar a las cosas por lo que realmente son y no por lo que puedan opinar las personas que demuestran incoherencia con sus actos.

La referencia al Holocausto venía de su referencia a la ley vigente como justificación última sobre la bondad o maldad de los actos (el Holocausto estaba amparado por las leyes de Hitler). Así pues, mi referencia no era demagogia sino, por decirlo de algún modo, la reducción al absurdo de su propio argumento por medio de su aplicación a un conocido caso extremo real, en el que además la instrumentalización de seres humanos para investigación médica tuvo su pequeño papel.

Y sobre de su amiga, desde luego lamento su fallecimiento. Personalmente, creo que actuó correctamente, más aún teniendo en cuenta que los médicos nunca suelen informar de malformaciones ciertas sino sólo probables. De todos modos, el caso de su amiga no es representativo por varias razones:

1.- Respecto al aborto, este caso es bastante atípico ya que plantea un conflicto real entre el derecho fundamental a la vida de la madre y el derecho fundamental a la vida del hijo (ambos dignos de ser defendidos, según diversas sentencias del TC). Este conflicto ocurre realmente muy pocas veces, ya que la mayoría de abortos se producen por simple comodonería de la madre, a la que no apetece "una carga más": de unos 115.000 abortos que se producen anualmente en España, sólo unos 4.000 se deben a malformaciones del feto, y de estos 4.000, la mayoría no ponen en absoluto en peligro a la madre, con lo que en ellos no existe el conflicto).

Así pues, su amiga se vio obligada a elegir entre dos bienes análogos y excluyentes, y ante la reducida posibilidad de que el diagnóstico estuviese equivocado, eligió defender la vida de su hijo, cualesquiera fuesen las consecuencias de su decisión. Por eso la alabo, aunque desde luego tampoco podría culparla si hubiese decidido hacer lo contrario, tan dramática y de difícil discernimiento era su extraordinariamente infrecuente tesitura.

2.- Respecto a los "niños-medicina", tampoco es un ejemplo relevante, puesto que la muerte de los numerosos embriones no instrumentalizables se produce sin que su desarrollo represente peligro para la vida de nadie: se les mata simplemente porque "no son útiles".

Un saludo.

punt dijo el día 15 de Febrero de 2012 a las 12:07:

[Pelorat] Obviamente, sobre cualquier cosa que se exponga como "convicción" no se puede debatir directamente sin caer en el clásico diálogo de sordos donde no se pasa de tirar trastos a la cabeza.

Así pues, para debatir sobre esas cuestiones se ha de debatir de forma indirecta, centrándose en la base sobre la que se apoya esa convicción, siempre que dicha convicción se apoye sobre bases racionales (es decir, con los dogmáticos no hay quien debata).

Mi oposición a esta práctica supuestamente médica (y digo supuestamente porque considero que viola flagrantemente el juramento hipocrático) proviene de la destrucción de numerosos embriones humanos que se producen como parte necesaria del proceso, destrucción que es, para cada uno de ellos, un aborto.

La obtención de "niños-medicina" se produce no mediante el diseño genético de un único niño sino mediante la selección de un embrión apto de entre muchos producidos. Para producirlos, la madre debe someterse a un procedimiento análogo al usado para al donación de óvulos: primero, se aplica un muy agresivo tratamiento hormonal en dos fases (tratamiento que es también muy peligroso, aunque a las mujeres se las suela informar deficientemente de este extremo). En una primera fase, el tratamiento busca inhibir la ovulación, para más adelante cambiarlo por su opuesto y desencadenar una ovulación múltiple, de forma que se puedan obtener tantos óvulos maduros como sea posible. Tras esto, la mujer se somete a una intervención mediante la que se extraen esos óvulos maduros que se han producido, que son fertilizados "in vitro" de modo que se disponga de numerosos embriones (cada uno de ellos un ser humano vivo que, como tal, es titular de los derechos fundamentales).

Vd dice que no aprueba el aborto, pero que en cambio está convencido de la bondad de este tipo de tratamientos. ¿Se da cuenta de que la obtención de un único "niño-medicina" conlleva la muerte absurda de decenas de hermanos suyos?

Desde luego, nadie puede negar la bondad del deseo de ayudar a la sanación de un hijo, pero ese bondadoso fin queda pervertido cuando a él se supedita todo, cuando se aplica la máxima de Maquiavelo de que "el fin justifica los medios". ¿En serio salvar a un ser humano justifica el causar la muerte a decenas?

Piénselo, y trate de hacerlo llamando a cada cosa por su nombre, que en esta cuestión se han instalado una serie de eufemismos que falsean la realidad de las cosas.

(SIGUE)

punt dijo el día 15 de Febrero de 2012 a las 11:33:

[1983] No soy demagogo: afirmo hechos objetivos que, como tales, son perfectamente comprobables, y baso en ellos mi argumentación.

Así pues, si vd quiere defender la postura contraria tendrá que desmontar mis argumentos en lugar de acusarme de demagogo (falacia "ad hominem"), afirmar falsedades (si fuera cierto que los embriones de menos de 14 semanas no son viables, no nacería nadie porque todos pasamos por esa fase del desarrollo: la viabilidad a la que se refiere vd se refiere sólo al momento en que pueden sobrevivir arrancados de su lugar natural, que es el vientre de su madre), apelar al sentimentalismo (clama por esos pobres padres de quienes afirma que "lo único que están haciendo es salvar la vida de su hijo", cuando también hacen otras cosas, como por ejemplo matar la vida de decenas de otros hijos no instrumentalizables) y, naturalmente, hacer afirmaciones rotundas que sólo apoya en esa chorrada de que quien no piense lo mismo no tiene mente racional.

¿Quiere argumentar? Pues empiece de una vez a hacerlo, porque su pataleta no vale ni el tiempo que desperdicio leyéndola.

Por cierto, vd sí había mencionado a autistas y demás cuando justificó la muerte de seres humanos aduciendo circunstancias que se dan en ellos.

Un saludo.

1983 dijo el día 14 de Febrero de 2012 a las 20:57:

Punt, no sea demagogo, por favor, no saque a los autistas, ni a los tullidos, que nadie los ha mencionado aquí. Intente ponerse en el lugar de esos padres que lo que único que están haciendo es salvar la vida de su hijo. No me voy a poner a discutir con usted sobre cuándo se puede hablar de vida humana, sólo le digo que los médicos afirman que un feto se considera viable a partir de las 14 semanas de gestación (y que conste que a mi un aborto en ese momento me parece un crimen). No puede comparar unas células con un niño, eso no lo concibe ninguna mente racional...tendrá sus motivos morales o religiosos y yo tengo los míos. Yo haría lo mismo que esos padres, salvar a mi hijo.

alpairo dijo el día 14 de Febrero de 2012 a las 20:25:

Pelorat, si quiere juzgarme, júzgueme por lo que escribo; pero no se comporte como un psicoanalista, intentando hacer mías presunciones que sólo existen en su mente.

Yo no he descendido al debate sobre los embriones, que podría haberlo hecho, sino que me he limitado a criticar el utilitarismo de concebir un hijo como mera herramienta para curar a otro.