La polémica por la anécdota del mandinga está alcanzando unos tintes que, cuando menos, rozan el ridículo. Un día después de que los diputados nacionalistas catalanes de ERC, CiU y el PSC montaran en cólera contra Carlos Dívar, la Generalidad ha realizado una protesta formal.
En la rueda de prensa posterior al Consejo Ejecutivo, el portavoz del gobierno catalán ha calificado de "menosprecio" la alusión que realizó el presidente del Supremo y del CGPJ al mandinga cuando respondía a una queja sobre la poca utilización del catalán en la justicia.
Francesc Homs ha celebrado que Dívar ya se haya disculpado aunque ha dicho estar dolido: "La sensación que denota es un menosprecio hacia el catalán y la identidad catalana".
Dívar negó tener interés de "ofensa" al referirse al mandinga después de que el diputado de ERC Joan Tardà le exigiera retirara dicha alusión en relación con el uso del catalán en la justicia, y añadió que citó esa lengua africana porque una vez debió valorar que una persona pudiera expresarse en dicho idioma ante su juzgado.
