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Suspenso sindical

Fracaso notable de los sindicatos en la primera huelga general en la enseñanza. Según el Gobierno, sólo un 22,7% secundó el paro.

Más de siete millones y medio de estudiantes, sus familias y un millón de trabajadores de todas las comunidades autónomas –a excepción de País Vasco, Baleares y La Rioja–estaban convocados este martes a una huelga sin precedentes en el sistema educativo, ya que por primera vez abarcaba todas las etapas desde Infantil hasta la Universidad.

El motivo, protestar por el recorte presupuestario en materia de Educación, cifrado en torno al 20 por ciento, y el Real Decreto Ley de Medidas Urgentes para racionalizar el gasto educativo, que persigue un ahorro de 3.000 millones más con medidas como incrementar la ratio de alumnos por aula o ampliar la horquilla de subida de tasas universitarias que pueden aplicar las autonomías.

Para los convocantes, entre los que figuran los cinco sindicatos que componen la mesa sectorial de Educación –UGT, CCOO, ANPE, CSIF y STES-I–, se trata de una "agresión" al sistema público que derivará en una pérdida de calidad, un empeoramiento de las condiciones para el alumnado y en la destrucción de unos 100.000 puestos de trabajo, especialmente de interinos y profesionales de apoyo educativo.

Piquetes... y guerra de cifras

Estos mismos convocantes cifraron en un 80% como media el seguimiento de la huelga por parte de los profesores en todos los niveles. Y no dudaron en calificarla de "éxito rotundo". Por la mañana, en Madrid y Cataluña varios piquetes trataban de conseguir que triunfara la protesta en las universidades impidiendo a primera hora acceder a las aulas.

Dos hombres fueron detenidos por causar incidentes durante una concentración contra los "recortes" en las cercanías de la facultad de Ciencias Políticas del campus de Somosaguas de la Universidad Complutense de Madrid. Según confirmaron la Jefatura Superior de Policía a la agencia EFE, el incidente ocurrió cuando varias decenas de personas se encontraban concentradas ante la citada facultad. En un momento dado, estas personas impidieron el acceso a la facultad de un coche en el que viajaba una persona con una minusvalía, lo que provocó la intervención de la Unidad de Intervención Policial y el arresto de dos personas.

Además, grupos de estudiantes lanzaron pintura contra la puerta del rectorado de la UCM y contra alguna de las facultades del campus de Ciudad Universitaria. Asimismo, los Mossos d'Esquadra detuvieron en Barcelona y Cornell de Llobregat a cinco personas por dañar y poner silicona en las cerraduras de escuelas.

Frente a los datos de los sindicatos, están los ofrecidos por el Ministerio de Educación. Según el departamento dirigido por José Ignacio Wert, el seguimiento conjunto de la huelga de la educación pública de este martes se situó en un 22,7 por ciento del personal laboral y funcionario de los centros docentes de la administración educativa. En un primera avance de participación, el Ministerio de Educación había situado el apoyo a la huelga en un 19,41 por ciento.

El propio ministro de Educación compareció, una vez ofrecidos los últimos datos, en el Congreso de los Diputados. Wert afirmó que ninguna de las comunidades autónomas que ha secundado la huelga general en la enseñanza ha llegado al 50 por ciento del seguimiento, por lo que ha "prevalecido la responsabilidad", ha incidido.

Y quiso agradecer directamente el "comportamiento responsable de quienes no han participado en la huelga" sin que eso suponga, según matizó, "una crítica" hacia quienes sí lo han hecho.

Wert llama al diálogo y censura los "graves" altercados de Baleares

Wert, que criticó los "graves" altercados en la consejería de Educación de Baleares, no quiso criticar la actitud del PSOE, que encabezó la marcha contra los recortes del Gobierno junto a los sindicatos convocantes. "El PSOE no figura entre los convocantes. No puedo decir lo mismo de otras fuerzas políticas presentes en esta Cámara. No desearía hacer de este tema un motivo de conflicto. Una vez pasado, es el momento de seguir dialogando, aproximar posturas", recalcó el ministro. "No estoy en la línea de utilizar esta situación como arma arrojadiza ni como arma incendiaria".

Según Wert, desde su ministerio "vamos a continuar la política de seguir explicando por qué se han tomado estas decisiones, de mantener una actitud abierta y de diálogo franco". 

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