
Los lunares rojos en la piel pueden aparecer con poca o ninguna advertencia y la mayoría son totalmente benignos. Como norma general, estos puntos rojos suelen aparecer a partir de la cuarentena, pero en algunos casos, pueden hacerlo a partir de los 20 o 30 años. Habitualmente estas marcas suelen manifestarse en el tronco y en la cara, aunque en ocasiones se pueden encontrar en las extremidades, y tienen una tonalidad de color rojo o morado. También son conocidos como angiomas, microangiomas, angiomas seniles, puntos de Campbell de Morgan o angiomas capilares, siendo en cualquier caso dilataciones de pequeños capilares.
En lo que respecta a las protuberancias de estos puntos rojos hay casos en los que son planas y en otros casos elevadas, y aunque habitualmente se encuentran en el tronco, también pueden aparecer en las piernas, los brazos e incluso el cuero cabelludo. Pero, ¿Qué son exactamente estos puntitos rojos o morados? Pues, en contra de los que se puede llegar a pensar, los puntos rojos que aparecen en la piel no son lunares sino que se tratan de pequeñas dilataciones capilares llamadas angiomas y son conocidos popularmente como puntos rubí. Son pequeñas manchitas vasculares sobreelevadas en la piel.
¿Qué son los lunares rojos?
Estos puntos, conocidos como angiomas o puntos rubí, son pequeñas dilataciones de los vasos sanguíneos en la piel que pueden aparecer como pequeñas manchas rojas o elevaciones que se asemejan a lunares. La presencia de pequeños vasos sanguíneos y capilares en su interior son los responsables del característico aspecto rojizo (de ahí el nombre de lunares de sangre). La causa exacta de los puntos rojos en la piel puede variar, pero a menudo están asociados con el envejecimiento y la exposición al sol. Estos angiomas suelen desarrollarse en la edad adulta y se vuelven más comunes con el tiempo.
Normalmente la aparición de estos puntos rubí está directamente relacionada con el envejecimiento de la piel y la herencia genética; de hecho, no se puede hacer nada para prevenirlos. No obstante, la sobreexposición solar o la exposición al sol sin utilizar fotoprotección también pueden suponer un factor de riesgo, ya que el sol es el principal causante del envejecimiento cutáneo. Existen diferentes términos para designar este tipo de lesiones cutáneas:
- Angioma senil
- Angiomas de cereza
- Lunar de sangre
- Punto rubí
- Puntos rojos
- Hemangioma capilar
- Hemangioma cereza
- Manchas de Campbell de Morgan
- Nevus rufus
Pero, ¿Cómo se ven en la piel? Los puntos rubí son generalmente de color rojo brillante y varían en tamaño desde pequeñas manchas hasta lesiones más grandes. Aunque son benignos, suelen ser cosméticamente molestos para algunas personas, especialmente si aparecen en áreas visibles de la piel. No obstante, aunque son benignos, es fundamental estar alerta a cualquier cambio en la apariencia, ya que algunas condiciones más serias, como el carcinoma de células escamosas, pueden manifestarse de manera similar en sus etapas iniciales.
¿Por qué aparecen estos puntos rojos?
La razón más habitual es el proceso de envejecimiento de una persona, por lo que es habitual que estos comiencen a aparecer una vez que se han cumplido los 40 años. Además, a medida que se envejece, estos puntos habitualmente aumentan en número. Asimismo, estos problemas con los vasos se transmiten frecuentemente en las familias, lo que hace que también haya un factor genético como una de las causas de la aparición de los puntos rojos en la piel.
¿Son un riesgo para la salud?
Cuando una persona se encuentra con puntos rojos en la piel es habitual que surjan inquietudes y preocupaciones, ya que se puede pensar que estos han aparecido a consecuencia de un problema de salud. Sin embargo, en este sentido hay que recalcar que no hay que preocuparse. La razón es que normalmente son unos puntos benignos y que, en la mayoría de las ocasiones desaparecen por ellos mismos. En cualquier caso, con la aparición de los puntos rojos en la piel el pronóstico acostumbra a ser bueno y lo único que puede suponer es que haya una alteración estética, aunque esta no tenga una implicación directa sobre la salud.
Sin embargo, en el caso de que de manera repentina aparecen muchos puntos rojos en la piel, se debe acudir al médico, a pesar de que puedan no reflejar, en principio, la existencia de ninguna enfermedad. Estos son habitualmente angiomas de araña.