Dios le perdone. Es de suponer que ya no podía con su conciencia y estaba a punto de arrepentirse públicamente de sus culpas y los abortistas lo eliminaron.
Dios le perdone. Es de suponer que ya no podía con su conciencia y estaba a punto de arrepentirse públicamente de sus culpas y los abortistas lo eliminaron.
Que curioso que los que se dedican a defender tanto la vida luego no tengan ningún reparo en disparar a una persona y matarla, cuanta hipocresía...