(Libertad Digital) Desde el PP, su portavoz en el Consistorio zaragozano, Domingo Buesa, manifestó su indignación por el hecho de que el Ayuntamiento no controle más los contenidos de la oferta cultural que propone y respalda. El popular criticó el montaje y dijo que "atenta y agrede los valores de nuestro Estado democrático y, en especial, a un partido político que representa a diez millones de españoles. No se puede pagar con dinero público un montaje que insulta a un partido político legítimamente votado y que representa los intereses de millones de ciudadanos. Es lamentable que este tipo de montajes sea considerado arte".
Buesa defendió el programa cultural del Consistorio, "que acerca a los zaragozanos las últimas vanguardias del arte y da a conocer a los nuevos creadores", pero exigió un mayor control de los materiales expositivos y anunció que su partido está estudiando elevar una queja al Defensor del Pueblo.
Buesa defendió el programa cultural del Consistorio, "que acerca a los zaragozanos las últimas vanguardias del arte y da a conocer a los nuevos creadores", pero exigió un mayor control de los materiales expositivos y anunció que su partido está estudiando elevar una queja al Defensor del Pueblo.
Según los organizadores de esta propuesta artística, informa este jueves El Heraldo de Aragón, lo que indignó al partido de la oposición es obra de un anónimo. El coordinador de la iniciativa, Sergio Beltrán, explicó que "es la misma idea que El muro de las palabras, es una superficie para la libre expresión de la gente". Los responsables indicaron que "En la Frontera", enmarcada dentro de "Primer Asalto. Arte Urbano", que en los bocetos de los planteamientos presentados para estas actuaciones artísticas no se contemplaban expresiones de esa índole.
La exposición En la Frontera ya dio que hablar en su primera edición cuando se retiró antes de lo previsto una valla publicitaria del ilustrador Óscar Sanmartín, en la que aparecía el "Cristo yacente" de Holbein y, sobre él, el lema "Game Over".