(Libertad Digital) La actriz, colaboradora del diario, comienza su columna con los versos del poema de Mario Benedetti leídos en el bautizo "laico" -figura inexistente en el Código Civil- celebrado en el Ayuntamiento de Madrid. Después, explica el por qué de esta peculiar ceremonia: "Sentimos la necesidad de celebrar que estaba entre nosotros. De darle una bienvenida cálida, sincera, coherente con nuestra forma de vivir y de convivir". Y habla de asumir un "compromiso libre de imposiciones heredadas por inercia, por costumbre o por miedo a mover las cosas de sitio".
Recuerda a sus padres para decir que gracias a personas como ellas ahora "hay posibilidad de elegir" y de "proponer nuevas opciones que nos definan", sin "culpa" y sin "castigo", en alusión al franquismo y al sacramento del bautismo.
Sobre la ceremonia y la polémica que levantó este viernes, aclara que ella y su familia quisieron para su hijo "una bienvenida laica, democrática y fiel a nuestra unión". "Fue un día precioso", añade la actriz, que termina su columna dando las gracias a todos y preguntándose "a quién molesta, a quién duele que practique su propia opción quien respeta las otras desde su diferencia".