L D (EFE) "Si el tabaco fuera una sustancia ilegal, la posesión de cigarrillos sería un delito y el número de fumadores se reduciría de forma drástica.", afirmó la publicación en un editorial.
Según la revista, cuya iniciativa fue tachada de "fascista" por las asociaciones de fumadores, el 80 por ciento de los británicos no consumen tabaco y tienen "derecho a la libertad para no exponerse a agentes que se ha demostrado que son cancerígenos". "The Lancet" indicó que unas mil personas mueren al año en este país como consecuencia de la inhalación del humo que desprenden los fumadores, al tiempo que advirtió de que fumar no sólo mata sino que hace más difícil que los adictos al tabaco puedan dejar ese hábito.
Desde el Gobierno, el ministro de Sanidad, John Reid, respondió que "es un poco extremo empezar a meter a la gente en la cárcel porque consumen tabaco". Asimismo, la Organización de Libertad para el Derecho a Disfrutar del Tabaco (FOREST, en sus siglas inglesas) recibió el editorial del "Lancet" con "sorpresa e incredulidad" y tildó la iniciativa de "fascista".
Según la revista, cuya iniciativa fue tachada de "fascista" por las asociaciones de fumadores, el 80 por ciento de los británicos no consumen tabaco y tienen "derecho a la libertad para no exponerse a agentes que se ha demostrado que son cancerígenos". "The Lancet" indicó que unas mil personas mueren al año en este país como consecuencia de la inhalación del humo que desprenden los fumadores, al tiempo que advirtió de que fumar no sólo mata sino que hace más difícil que los adictos al tabaco puedan dejar ese hábito.
Desde el Gobierno, el ministro de Sanidad, John Reid, respondió que "es un poco extremo empezar a meter a la gente en la cárcel porque consumen tabaco". Asimismo, la Organización de Libertad para el Derecho a Disfrutar del Tabaco (FOREST, en sus siglas inglesas) recibió el editorial del "Lancet" con "sorpresa e incredulidad" y tildó la iniciativa de "fascista".