L D (EFE) Cinco comunidades autónomas (Asturias, Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha y Madrid) continúan en alerta "amarilla" (riesgo bajo) ante las precipitaciones de nieve que se van a registrar. Otra comunidad, Cataluña, está en alerta a causa de los fuertes vientos, y Baleares está también en alerta "amarilla" ante la previsión de que se registren fuertes vientos y tormentas.
Según los datos de la Dirección General de Tráfico, las precipitaciones de nieve obligan a usar las cadenas para transitar por casi cuarenta puertos de montaña y han obligado a cerrar otros doce altos, aunque casi todos ellos pertenecientes a la red secundaria de carreteras. El único puerto de montaña perteneciente a la red principal afectado por la nieve es el de Pajares (Nacional-630), entre Asturias y León, que requiere el uso de las cadenas.
En Castilla y León la nieve y el hielo han impedido a cerca de 1.200 alumnos acudir a clase y han motivado además la retención de unos sesenta camiones que se dirigían a Cantabria, en el término palentino de Aguilar de Campoo.
En Cantabria unos 600 alumnos tampoco han podido acudir a clase en centros educativos de Campoo y Valderredible como consecuencia del temporal, que ha impedido o dificultado el funcionamiento del transporte escolar, pero ningún colegio ni instituto se ha cerrado. La Delegación del Gobierno de Cantabria ha movilizado todos los medios técnicos y humanos disponibles para hacer frente al temporal de lluvia, viento y nieve que afecta a la región, en especial a la A-67 en dirección Palencia-Cantabria.
En Galicia el fuerte temporal que afectó este lunes a todo el litoral de la comunidad autónoma va remitiendo paulatinamente y a media tarde de este martes podría quedar restablecida la normalidad. Sin embargo, 197 alumnos de la provincia de Lugo se han quedado sin clase como consecuencia de la nieve que afecta a las zonas de alta montaña.
En el País Vasco el riesgo de inundaciones está remitiendo, aunque el Departamento de Interior mantiene el Plan de Emergencia activado este lunes, ha informado esta consejería. Se ha constatado que todos los ríos de la Comunidad se encuentran crecidos, aunque ninguno sobrepasa el nivel de alerta, y los pantanos se encuentran además cerca del límite de su capacidad pero su situación actual no es preocupante.