Ante el precario estado de salud de algunos de los miembros de la expedición, se dio aviso al Grupo de Intervención y Emergencias del Gobierno de Canarias, que envió a la zona un helicóptero para rescatar a cinco de ellos. Estos inmigrantes sufrían hipotermia y lesiones por golpearse con las rocas y se les evacuaba al Hospital General de Fuerteventura, en la capital de la isla. Al resto de los inmigrantes, al igual que los patrones de las barcas, se les trasladaba inicialmente a dependencias de la Guardia Civil.
Desde allí se les llevará luego a Puerto del Rosario, donde los inmigrantes serán entregados a la Policía Nacional para que tramite su expulsión del país, según lo previsto en la Ley de Extranjería, mientras que los dos patrones, de origen marroquí, serán puestos a disposición judicial, acusados de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
Localizan a 65 inmigrantes en Fuerteventura tras llegar en dos pateras a plena luz del día
Una expedición de inmigrantes formada por 65 inmigrantes subsaharianos ha arribado este domingo a una costa del municipio de Tuineje, en Fuerteventura. Cinco de ellos han tenido que ser rescatados en helicóptero y trasladados posteriormente a un hospital por su precario estado de salud.
L D (EFE) La Guardia Civil y de Protección Civil de Tuineje han tenido que socorrer al resto de los inmigrantes, todos ellos adultos y varones, que han llegado agotados y han tenido muchas dificultades para abandonar el lugar del desembarco y alcanzar los vehículos en que se les trasladaba luego a dependencias del Instituto Armado.
La llegada de los inmigrantes ha tenido lugar a plena luz del día, cuando, pasadas las dos de la tarde, se detectaba que dos barcas se aproximaban a tierra por la zona costera conocida como Playa del Caracol. Hasta allí se habían desplazado agentes de la Guardia Civil, que han podido verificar cómo los dos patrones de las pateras abandonaban una de las embarcaciones y emprendían camino de regreso a África a bordo de la otra. La intervención de una patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, que iniciaba una persecución tras darse la alarma de la huida, permitía detener a ambos patrones cuando ya estaban a unas 12 millas de la isla.
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