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Sindicatos y empresarios se embolsan la mitad de las ayudas para formación

Desde 1998 la Cámara de Cuentas no ha hecho ningún informe de fiscalización ni a sindicatos ni a empresarios. De ese único informe sabemos que CC.OO, UGT y la CEA dedicó ayudas millonarias no a formación, sino a "otros menesteres".

Es lo que se desprende del único informe de fiscalización realizado por la Cámara de Cuentas andaluza en 1998 sobre las subvenciones a la formación que reciben sindicatos y empresarios.

De hecho, de aquel informe se desprende que CCOO y UGT destinaron casi el 50 por ciento del importe de las subvenciones recibidas en gastos de gestión, generales y de funcionamiento a los que podría obtener beneficios posteriores mediante las subcontrataciones.

La Conferencia de Empresarios Andaluces destinó el 40 por ciento a los mismos menesteres. Además, el informe ponía de manifiesto que había gastos sin justificar. De mantenerse estos porcentajes, desde 2004 a principios de 2009, UGT habría obtenido fondos para sí misma por importe de 58,5 millones de euros; CCOO habría ingresado 65,2 y la CEA, 64. Desde 1998 hasta ahora, que han pasado más de 12 años, la Cámara de Cuentas no ha hecho informe alguno de fiscalización a pesar de que las subvenciones se han multiplicado.

Pero para librarnos de la tentación de especular, unos cuadros del único informe emitido por la Cámara de Cuentas nos confirma que, en realidad, de las subvenciones recibidas, las organizaciones sindicales y empresariales se llevan un porcentaje muy sustancioso.

En el caso de UGT, de un total de 1.345,5 millones de subvención justificada, profesores, seguridad social y otras actividades sólo importan el 52 por ciento del total. Sin embargo, el dinero que se destina a seguros, materiales, administración, gastos corrientes, etc. ascienden a 642,6 millones, esto es, casi el 48 por ciento del total de la subvención.

El caso de Comisiones Obreras refleja una realidad parecida, aunque el porcentaje de us propio de los recursos baja al 45 por ciento:

En este caso, el importe de la subvención de la Junta que se destina a profesores y gastos derivados, era de 744,1 millones, un 54,7 por ciento del total mientras que lo que se quedaba la organización para gastos varios ascendía a poco más del 45 por ciento.

En el caso de la CEA, el porcentaje utilizado en el propio funcionamiento para aplicar la subvención al fin de la formación es del 40 por ciento.

Un negocio para empresarios y sindicatos

Si se tiene en cuenta el conjunto del dinero percibido para estas actividades por sindicatos y empresarios, podemos decir que de cada 100 euros destinados a la formación por los Acuerdos de Concertación, UGT, CC.OO y CEA reservaron para sí entre 40 y 48 euros.

Teniendo en cuenta que UGT y CCOO obtuvieron desde 2004 a enero de 2009 nada menos que 265 millones de euros, la cantidad empleada en sí mismos para poder impartir los cursos subvencionados superó los 100 millones de euros. En el caso de la CEA, que recibió 160 millones de euros entre 2004 y enero de 2009, la cantidad destinada a sí misma ascendió a 64 millones de euros.

El negocio redondo para ambas ramas de la estructura laboral de Andalucía y de España está en los beneficios derivados de la actividad. Por poner unos ejemplos:

- Para impartir los cursos hacen falta locales, locales que son alquilados por las organizaciones...a terceros o a sí mismos.
- Los cursos exigen materiales y ediciones de documentos que son confeccionados por empresas propias o ajenas relacionadas con ellos.
- Aumenta su poder social puesto que pueden contratarse a centenares de profesores afines
- ¿Cómo saber si la energía que se gasta está en la proporción adecuada a los cursos que se imparten?
- ¿Qué se hace con los equipos adquiridos para un curso de tres meses, ordenadores, impresoras, etc. tras la realización del curso? ¿Se lo quedan las organizaciones promotoras?
- ¿Quiénes dan los cursos? Bien profesores individuales o bien empresas organizadas. 

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