(Libertad Digital) "La pobreza tiene mucho que ver con el Amor y con la Solidaridad, así nos lo han enseñado filósofos y poetas", escribe Rodríguez Zapatero a un escritor con el que le unen lazos de admiración y también de amistad.
El azar o la necesidad han querido que esta exaltación de la pobreza –que también fue el tema de la disertación de Gamoneda al recibir el Cervantes– coincida con los escándalos de comisiones urbanísticas y tráfico de influencias en el PSOE de Ibiza y en el seno de la CNMV, respectivamente.
"La penuria tiene múltiples caras; por eso es tan necesaria la Poesía, para mostrar que la esperanza emanada de la posibilidad humana de imaginar y actuar, alumbra allí donde la miseria, en todas sus facetas, quiere imponerse como único destino", señala Zapatero, inspirado por la lectura de Ferrocarril de Matallana.
En esos versos, Zapatero ve la "experiencia social" del poeta durante el franquismo. "Saberte un hombre huérfano de esperanza en tu ciudad, en tu país, en tu universo, hizo que despertaras –ésas son las lecciones impagables de los padres y de los maestros– al convencimiento de que la injusticia sólo trae dolor innecesario, tristezas y humillación".
"Yo aprendi de ti, maestro Gamoneda", le dice el presidente, "que con el tren se aleja algo que es cierto aunque no puede ser pensado; es algo mío y no me pertenece. Está dentro y fuera de mi corazón: se llama Justicia, se llama Solidaridad. Se llama Verdad que, para hallarse, debe comenzar porque la mentira, que aleja a los seres humanos de la libertad y los hace temerosos, sea descrita".

