La Policía Nacional ha vuelto a desmantelar el karaoke de Parla denominado Distrito 1 por servir ahora como tapadera para la prostitución y el tráfico de drogas. Según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Madrid, los responsables del local alquilaban salas donde se ofrecían servicios de compañía y diversas sustancias estupefacientes, entre ellas ketamina, éxtasis, tusi y una droga conocida como "agua de dios", que obligaban a las mujeres a ingerir.
La operación se enmarca dentro del Plan Parla, una iniciativa impulsada por la Delegación del Gobierno en Madrid con el objetivo de reforzar la seguridad en esta localidad del sur de la región, debido al aumento de delitos en la zona.
Bajo la apariencia de un karaoke, el negocio ofrecía la posibilidad de alquilar salas privadas para fiestas con comida y bebidas. Sin embargo, una vez dentro, los clientes podían adquirir drogas directamente al personal del local y acceder a espacios donde se encontraban mujeres que prestaban servicios de compañía.
El pasado 26 de enero, la policía inspeccionó el establecimiento, en el que se incautaron 80 gramos de ketamina, cinco gramos de éxtasis, ocho gramos de tusi y 63 sobres de la también conocida como "agua sagrada", una droga consumida principalmente por la comunidad asiática en España cuyo efecto es altamente desinhibidor a nivel sexual. Según la investigación, los clientes del local no solo la consumían, sino que obligaban a las mujeres a ingerirla.
Además, 23 personas han sido detenidas, acusadas de delitos contra la salud pública. Entre los arrestados, uno tenía en su contra una orden de detención y extradición a nivel europeo.
No es la primera vez que el anteriormente llamado El Cielo y el Mundo es escenario de delincuencia. En 2015, el local fue el escenario de una brutal batalla campal en la que un ciudadano chino intentó asesinar a un compatriota.