La californiana Lori Vallow Daybell se enfrenta al juicio por la muerte de su cuarto marido, el empresario Charles Vallow, representándose a sí misma y defendiendo su inocencia. La acusada —conocida como la madre "del Apocalipsis", "de los últimos días" o "del juicio final", tras ser condenada por matar a sus dos hijos menores (Tylee Ryan y Joshua Jaxon ‘J.J.’ Vallow, de 16 y 7 años) y conspirar para asesinar a la mujer de su amante— ha señalado que el fallecimiento de su entonces esposo fue "una tragedia familiar", pero "no un crimen".
Cabe recordar que Charles murió tiroteado el 11 de julio 2019 en su casa de Arizona (Estados Unidos) a manos de un hermano de la acusada, Alex Cox. Él alegó que había disparado en defensa propia. Y lo cierto es que nunca fue juzgado por ello. Falleció por causas naturales (un coágulo de sangre en los pulmones) meses después estos hechos y de haber intentado matar también al ex de una sobrina. Suceso por el que Lori —de 51 años— se tendrá que volver a sentar en el banquillo de los acusados próximamente.
Cinco matrimonios
En ambos casos, a ella se le acusa de conspirar para cometer asesinato. La muerte y (el crimen) ha rodeado a la mujer y su familia desde que el escritor Chad Daybell entra en su vida. Hasta ese momento, Lori era una atractiva madre americana con tres hijos y un intenso pasado amoroso. Ya se había casado cuatro veces (y estaba por venir la quinta). La primera fue con su amor del instituto, Nelson Yanes. Aunque el matrimonio duró poco y no tuvieron hijos.
La segunda llegó poco después con William Lagioia, con quien tuvo un varón -Colby— a quien su tercer marido—Joseph Ryan— le dio el apellido. Fruto de esa relación nació en 2002 su hija Tylee, a quien realmente crio el cuarto: Charles Vallow. Con él, la exmiss y esteticista parecía haber encontrado la estabilidad. Era miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días popularmente conocida como mormona— y ella se unió a su fe.
El cambio de Lori
Parecían una familia feliz. Se casaron en 2006 y adoptaron en 2014 a un niño de 2 años, su hijo ‘J.J.’ (que era sobrino nieto de él y tenía autismo). La relación con el cuarto fue bien hasta que ella conoció a Chad Daybell, el escritor al que idolatraba. Según los datos aportados por la fiscalía, fue en 2018 durante una conferencia en Utah. Él también era mormón, pero más radical. Pertenecía a un movimiento apocalíptico llamado ‘Preparing a people’. En opinión del Ministerio Público, Lori estaba influida por las ideas que él le había metido en la cabeza y este sería trasfondo en el que desarrollaron los hechos.
Quienes la conocieron antes de Chad entrara en su vida, aseguran que la mujer dio un cambio radical tras conocer al escritor. Así lo señala su entorno más cercano, entre ellos su primer hijo —Colby—, en el documental de Netflix ‘Sins of our mother (Los pecados de nuestra madre)’. Él tenía unas creencias extrañas, hasta el punto de convertirse en el líder de un grupo de amigos con el que realizaba supuestos exorcismos. Lori se enamoró locamente de él y empezó una nueva vida, dejando atrás todo lo anterior. Y eso incluía también a sus hijos pequeños, que aún vivían con ella.
La desaparición de los niños
Cuando Charles muere, ella se muda (con los dos menores, su hermano Álex y una sobrina) a Redburg, muy cerca de donde vive su novio Chad, quien se terminaría convirtiendo en su quinto marido una vez que éste acabó con la vida de su esposa y madre de sus cinco hijos. La fiscal Treena Kay ha argumentado —en la apertura del juicio— que ella quería matar a a su todavía esposo para cobrar el millón de euros del seguro de vida y poder casarse con su amante manteniendo "el mismo estilo de vida".
Los niños desaparecieron con días diferencia dos meses después de que su tío asesinara a Charles (padrastro de la niña y padre adoptivo del varón), el 8 y el 22 de septiembre de 2019. Según los fiscales del caso, este hecho coincidió en el tiempo con la solicitud de aumento de la prima del seguro de vida de Chad y su entonces mujer —Tammy—, que murió apenas un mes después (el 19 de octubre).
Descubren los asesinatos
Dos semanas más tarde, el 5 de noviembre, Lori y su amante se casan en Hawáii. La pareja no tuvo reparos en publicar las imágenes del enlace felices y sonrientes— a través de las redes sociales. Algo que llevó a los investigadores a sospechar del fallecimiento de la mujer de Chad. Exhumaron su cuerpo y la autopsia realizada al cadáver reveló que había muerto por asfixia.
Los restos de los niños fueron hallados en junio de 2020, enterrados en el patio de Chad. Él fue sentenciado a pena de muerte en 2024 por el triple crimen: el de su mujer (con quien llevaba casado desde 1990) y los hijos de Lori (localizados en su propiedad de Idaho). Ella fue condenada al cumplimiento de tres cadenas perpetuas consecutivas. Durante el juicio quedó patente la influencia de las ideas religiosas de ambos en el terrible desenlace.
¿Sus hijos eran "zombies"?
En 2019, Charles pide el divorcio de Lori alegando que su mujer creía ser una deidad que debía evitar el Apocalipsis. Cuando Alex Cox —su cuñado, también mormón— le dispara, con resultado de muerte, ellos ya no vivían juntos pero seguían casados. Y ella mantenía una relación extramatrimonial con Chad desde hacía meses.
El escritor la convenció de que habían estado casados en varias vidas anteriores y de que ella era una especie de "diosa sexual" que tenía como misión ayudarle a salvar el mundo. Estaban convencidos de que las personas podían convertirse en "zombies". Una palabra que —según uno de los testigos— Lori habría utilizado para definir a sus propios hijos, los dos a los que asesinó.
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