El presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, sigue cumpliendo las promesas que realizó durante la campaña de las elecciones autonómicas. De la mano de su socio de gobierno, (Vox) han conseguido derogar definitivamente la tasa turística. Una medida que había sido puesta sobre la mesa por el anterior gobierno socialista, presidido por Ximo Puig, y que había generado cierta controversia en la región. La decisión ha sido recibida con gran satisfacción por parte del Partido Popular de la Comunidad Valenciana (PPCS), que ha aplaudido la determinación y rapidez del presidente para tomar esta decisión.
Esta medida ha generado un gran impacto en el sector turístico, que ve con buenos ojos la eliminación de la tasa turística. La derogación de esta medida supone un respiro para las empresas del sector, que han tenido que enfrentarse a numerosos desafíos en los últimos meses debido a la pandemia. Además, se espera que esta decisión contribuya a mejorar la competitividad de la Comunidad Valenciana como destino turístico, atrayendo a un mayor número de visitantes.
La noticia ha sido recibida con entusiasmo por parte de los ciudadanos y empresarios de la Comunidad, quienes consideran que la derogación es un paso en la dirección correcta. La medida había generado preocupación en el sector turístico, ya que se temía que pudiera tener un impacto negativo en la llegada de turistas a la región. La eliminación de este impuesto fue una de las grandes promesa de Carlos Mazón durante su candidatura, y desde su partido siempre han sostenido que la tasa era innecesaria.
Por otro lado, la decisión del presidente de la Generalidad ha sido elogiada por el PPCS, que ha destacado la formación, la derogación de la tasa turística demuestra el compromiso del gobierno regional con el impulso del turismo en la Comunidad Valenciana.
Desde el inicio de su andadura como presidente, Carlos Mazón ha defendido los derechos de los valencianos y es fiel a la Agenda Valenciana. Junto con sus socios de Vox, además de introducir medidas propias como la reforma fiscal, ha enmendado una parte importante de la política lingüística del Botànic, como la reserva del 25% del valenciano en las etapas educativas en zonas castellanohablantes, y prepara cambios importantes en educación, como el retorno de las dos líneas lingüísticas frente al plurilingüismo de la ley actual.
También pretendían modificar la ley que regula la televisión y radio autonómica, pero en la búsqueda de apoyos desde la oposición a cualquier precio, este jueves retiro varias enmiendas de la ley para ganarse el "posible" favor de Compromís para los presupuestos.