L D (Agencias) El portavoz de Asuntos Económicos y Monetarios, Gerassimos Thomas, indicó que "dado los desvíos presupuestarios de Francia en 2003, vemos que el déficit de la zona euro corre el riesgo de estar cerca o incluso exceder el 3 por ciento, lo que demuestra la situación general". El Ministerio francés de Economía y Finanzas anunció este martes que prevé que el déficit público para 2003 se sitúe en torno al 4 por ciento del PIB, cifra que de confirmarse llevaría a este país a violar por dos años consecutivos los preceptos del Pacto de Estabilidad, pues en 2002 se situó en 3,1 por ciento.
Thomas dijo que, si la cifra del 4 por ciento es correcta, "se trata de un alza importante" en relación con los datos que Francia incluyó en la actualización de su programa de estabilidad, que fueron las empleadas por los el Consejo de ministros de Economía y Finanzas (Ecofín) para hacer sus recomendaciones a ese país el pasado junio. El Ecofín abrió el pasado junio un procedimiento a Francia por déficit excesivo y le formuló diversas recomendaciones a la vista de los resultados alcanzados en 2002. Thomas indicó que una previsión del 4 por ciento para el déficit público francés "implica que no hay una intensificación de la consolidación presupuestaria en 2003". La Comisión Europea aún no ha recibido la notificación oficial de las autoridades francesas y de otros países sobre las previsiones del déficit, aunque se esperan para este martes, a excepción de Holanda, que las comunicará una semana más tarde, agregó el portavoz.
Francia notificó este lunes a la Comisión Europea un déficit público para 2003 equivalente al 4 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), informó el Ministerio de Economía y Finanzas. Se trata del déficit público más elevado notificado hasta la fecha por un país de la Unión Europea (UE) y se aleja en un punto del techo del 3 por ciento aceptado por el Pacto de Estabilidad, que Francia supera por segundo año consecutivo tras el 3,1 por ciento de 2002. La deuda asociada al déficit del 4 por ciento es del 61,2 por ciento, lo que sobrepasa el límite del 60% marcado por la UE.
Eso significa que París ha comunicado un déficit de unos 61.000 millones de euros (cerca de 66.000 millones de dólares), frente a 47.600 millones de euros en 2002 (más de 51.800 millones de dólares, un 3,1 por ciento del PIB). No obstante, el Ministerio de Economía y Finanza, que encabeza Francis Mer, señaló en un comunicado que espera "una próxima recuperación coyuntural". En su reciente visita a Bruselas, el primer ministro francés, Jean-Pierre Raffarin, insistió en la voluntad de Francia de respetar sus compromisos europeos, pero precisó que su prioridad para 2004 es el crecimiento económico y el empleo. Francia, al igual que Alemania, Italia y Holanda, está bajo la amenaza real de entrar en recesión económica, lo que en el caso francés sólo ha ocurrido en dos ocasiones desde el final de la Segunda Guerra Mundial, en 1975 y en 1993.
El crecimiento de la economía francesa en 2003 será igual a cero o apenas superior y la tasa de paro corre el peligro de superar el listón del 10 por ciento de la población activa a finales de este año, según los analistas. Ante este panorama, resulta difícil cuadrar las cuentas del proyecto de ley de los presupuestos del Estado para 2004 y las rebajas impositivas prometidas por el presidente francés, Jacques Chirac, en su campaña electoral de 2002. Chirac prometió una reducción del 30 por ciento del impuesto sobre la renta de las personas físicas en cinco años. Ese impuesto bajó un 5 por ciento en 2002, poco después de hacerse con el poder el actual Gobierno, y este año un 1 por ciento.
Thomas dijo que, si la cifra del 4 por ciento es correcta, "se trata de un alza importante" en relación con los datos que Francia incluyó en la actualización de su programa de estabilidad, que fueron las empleadas por los el Consejo de ministros de Economía y Finanzas (Ecofín) para hacer sus recomendaciones a ese país el pasado junio. El Ecofín abrió el pasado junio un procedimiento a Francia por déficit excesivo y le formuló diversas recomendaciones a la vista de los resultados alcanzados en 2002. Thomas indicó que una previsión del 4 por ciento para el déficit público francés "implica que no hay una intensificación de la consolidación presupuestaria en 2003". La Comisión Europea aún no ha recibido la notificación oficial de las autoridades francesas y de otros países sobre las previsiones del déficit, aunque se esperan para este martes, a excepción de Holanda, que las comunicará una semana más tarde, agregó el portavoz.
Francia notificó este lunes a la Comisión Europea un déficit público para 2003 equivalente al 4 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), informó el Ministerio de Economía y Finanzas. Se trata del déficit público más elevado notificado hasta la fecha por un país de la Unión Europea (UE) y se aleja en un punto del techo del 3 por ciento aceptado por el Pacto de Estabilidad, que Francia supera por segundo año consecutivo tras el 3,1 por ciento de 2002. La deuda asociada al déficit del 4 por ciento es del 61,2 por ciento, lo que sobrepasa el límite del 60% marcado por la UE.
Eso significa que París ha comunicado un déficit de unos 61.000 millones de euros (cerca de 66.000 millones de dólares), frente a 47.600 millones de euros en 2002 (más de 51.800 millones de dólares, un 3,1 por ciento del PIB). No obstante, el Ministerio de Economía y Finanza, que encabeza Francis Mer, señaló en un comunicado que espera "una próxima recuperación coyuntural". En su reciente visita a Bruselas, el primer ministro francés, Jean-Pierre Raffarin, insistió en la voluntad de Francia de respetar sus compromisos europeos, pero precisó que su prioridad para 2004 es el crecimiento económico y el empleo. Francia, al igual que Alemania, Italia y Holanda, está bajo la amenaza real de entrar en recesión económica, lo que en el caso francés sólo ha ocurrido en dos ocasiones desde el final de la Segunda Guerra Mundial, en 1975 y en 1993.
El crecimiento de la economía francesa en 2003 será igual a cero o apenas superior y la tasa de paro corre el peligro de superar el listón del 10 por ciento de la población activa a finales de este año, según los analistas. Ante este panorama, resulta difícil cuadrar las cuentas del proyecto de ley de los presupuestos del Estado para 2004 y las rebajas impositivas prometidas por el presidente francés, Jacques Chirac, en su campaña electoral de 2002. Chirac prometió una reducción del 30 por ciento del impuesto sobre la renta de las personas físicas en cinco años. Ese impuesto bajó un 5 por ciento en 2002, poco después de hacerse con el poder el actual Gobierno, y este año un 1 por ciento.