(Libertad Digital) La primera reflexión del presidente del Gobierno en funciones en Telecinco fue su valoración sobre la elecciones del 14-M: "Yo no me he presentado a las elecciones pero mi partido no ha ganado, todos tenemos responsabilidad en ello pero hace falta tiempo". De todas formas, Aznar recordó, "yo no iba a ser presidente en ningún caso, ganase o no mi partido".
Juan Pedro Valentín le preguntó por los "errores" que ha su juicio pudieron desembocar en la derrota. Aznar contestó que "no tengo la soberbia a suficiente para pensar que se acierta siempre", pero asimismo, señaló, "ni soy tan masoquista" para creer que se ha fallado en todo.
En el resto de la entrevista, el director de los servicios informativos de Telecinco fue tan protagonista como el propio Aznar. Apenas le dejaba acabar las frases para acotar con expresiones de asombro o preguntas cortas. Llegó el tema del No a la guerra y su posible peso en la decisión de los electores el pasado domingo 14. Aznar dijo que "los españoles votan lo que quieren" y eso no le hace arrepentirse de su política: "Hicimos de la lucha contra el terrorismo nuestro principal objetivo. Además, señaló, "España tiene un nivel de bienestar material mejor que nunca y deseamos que España siga prosperando".
1. VERDADES Y MENTIRAS SOBRE ETA Y AL-QAEDA
Las preguntas de Valentín fueron directas: "¿Al Qaeda ha ganado?". Para el presidente en funciones "España sufrió un atentado terrible" en el que la única "intencionalidad era ir contra España, contra nuestro sistema". Sin embargo, dejó claro en todo momento que "el resultado de las elecciones es legítimo".
La siguiente pregunta se refirió a la labor del Gobierno durante la masacre de Madrid: "El Gobierno ha dicho la verdad en todo momento". Además, en alusión a la desclasificación de informes del CNI –Valentín insistiría hasta el límite más adelante–, Aznar recalcó que "hemos demostrado" que se dijo la verdad. "Otros –lamentó– tal vez no lo han dicho". Insistió en la postura del Gobierno durante la crisis: "Desde el primer momento pensamos que era obra de ETA, y así se lo dijimos al país". De hecho, añadió, "era lógico", y lo argumentó en base a todos los indicios que hacían pensar en la autoría de la banda: la furgoneta con media tonelada de explosivo, los intentos de volar trenes abortados por la Guardia Civil y hasta el intento de volar la Torre Picasso con 1.700 kilos de dinamita en 2000. Sin embargo, Aznar recordó que cuando se tuvo que abrir otra línea de investigación, se hizo.
El presidente fue cogiendo el ritmo a la entrevista –elevado porque así lo impuso Valentín– y salió al paso de los ataques a su Ejecutivo: "Acepto todas las criticas menos la calumnia y estoy dispuesto a defender la dignidad de un Gobierno honrado". Valentín interrumpía "¿Quién calumnia?". Y Aznar contestaba sin dejar casi espacio: "Los que dicen que el Gobierno ha mentido y ha manipulado". Después cerró: "hemos dado toda la trasparencia que puede dar un Gobierno", en alusión a los informes del CNI.
Quizá fue este uno de los asuntos en los que estuvo más brillante. No le hacía falta ponerle nombres y apellidos a sus reproches y aunque Valentín le insistía, quedaba claro: "Cuando el Gobierno es trasparente, se le dice que no debe hacer lo que hace. ¿En qué quedamos? Se pide desclasificación y luego se dice que se perjudica". Todo un mensaje al PSOE y en concreto a Alfredo Pérez Rubalcaba que este lunes ha quedado en evidencia al criticar lo que horas antes exigía, la desclasificación.
Por si faltaba nitidez al destinatario del reproche, Aznar recordó a "los que han dicho que España necesita un Gobierno que no mienta" que él está "de acuerdo", pero no "cuando se dice la verdad". Es decir, le recordó a Rubalcaba la comparecencia y frase en el día de reflexión desde la sede de Ferraz.
La línea de ataque dialéctico de Valentín pasó por recordar a Aznar sus decisiones personales en los trágicos días de la masacre de Madrid. Para pedir explicaciones sobre la llamada del presidente a directores de prensa de Madrid y Barcelona, Valentín preguntó: "¿Le preocupaban los titulares?". Aznar –visiblemente cansado– elevó ligeramente el tono: "Yo sé lo que es un atentado terrorista porque lo he sufrido. Sé lo que es tener una familia desgarrada y sé lo que es presidir el partido que más sangre ha vertido en defensa de las libertades". Para hacer patente su seriedad en este terreno, apuntó que "no le permitiría jamás jugar con bromas en ese terreno" y pasó a explicar que llamó a los periódicos "porque creemos que es ETA" y que les volvió a llamar por la tarde para anunciar que se abría otra vía aunque la prioridad siguiera siendo ETA. En definitiva –lo repitió varias veces– "lo que quiere el terrorismo es que arrojemos la toalla" y "se ha puesto en duda que el Gobierno luche contra el terrorismo". Valentín llegó a excusarse: "Yo no", para después insistir con datos concretos como el de la furgoneta y la cinta coránica, la mochila con explosivos no usados habitualmente por ETA y el "empecinamiento del Gobierno" en que fue esta banda.
2. "PERO ¿ES QUE HAY TERRORISMO BUENO Y TERRORISMO MALO?"
Aznar dijo que "le habla una persona que no distingue entre terrorismos, tenemos más de 200 muertos, me da igual quine haya sido". Eso sí, "lógicamente piensas en ETA después de 30 años". Valentín insistía en no cerrar esa vía y Aznar en defender la "honorabilidad y la trasparencia" de su Gobierno. Tuvo que decirle a Valentín que abandonara la idea de que el Gobierno ha intentado demostrar que ha sido ETA aunque los avances en la investigación comenzaran a apuntar a otra posibilidad.
Aquí fue cuando Aznar lanzó la pregunta "pero es que hay terrorismo bueno y terrorismos malos malos?". A lo que él mismo contestó: "Todos son iguales, es la principal amenaza en todo el mundo y sobre todo después del 11-S aunque puede haber gente que no lo quiera ver". "Mantengo que en todo momento el Gobierno dio información y otros manipularon". Valentín insistió "¿quiénes?". Aznar también: "Los hechos determinarán lo que hicieron unos y otros".
En cuanto a los informes del CNI, se desclasificaron porque "no había nada que ocultar... no es cuestión de quedar en buen a o mal lugar" e insistió que desde la oposición "se nos pide una cosa y la contraria". Pese a todo, Valentín insistía en que el CNI ha quedado en mal lugar porque se ha demostrado que no informaba bien al Gobierno. Le preguntó si el director de los servicio de inteligencia sería cesado o había presentado la dimisión. Aznar lo negó y no ocultó su sorpresa por la pregunta. Para Aznar, la masacre sí tuvo algo que ver con el voto ciudadano "¿cuánto? Hace falta perspectiva. Pero no estoy dispuesto a que se manche la honorabilidad del Gobierno".
3. LAS TROPAS ESPAÑOLAS Y LA GUERRA CON IMÁGENES DE LA AZORES
Retirar tropas de Irak como parece que quiere hacer Zapatero es para Aznar "un gravísimo error" y, además "han tomado buena nota los propios terroristas. Zapatero debe saber qué quiere hacer con las tropas, pero el mensaje de concesiones al terrorismo me parece mal".
Además, insiste en que pese al resultado de marzo "9.600.000 votantes han respaldado la política del PP", incluida la guerra de Irak. "Y once no", dice Valentín. "Yo le doy mi opinión", concluye Aznar. En cuanto a las armas de destrucción masiva, el presidente en funciones se felicitó de que "el mundo es mejor sin Sadam y estoy convencido de que hemos hecho bien". Valentín contrapuso a esa idea que la inestabilidad en Irak es ahora mayor, que ha empeorado la situación en Oriente Medio y que no ha mejorado "la situación global". Aznar contesta que si es preferible vivir con las armas biológicas de Sadam, la invasión a terceros países o renunciar a progresos como el experimentado por Libia. Además, sentenció "el 11-S no se lo inventó nadie y el 11 de marzo tampoco es consecuencia de nada". Sencillamente, "formamos parte del mundo amenazado por el fundamentalismo islámico".
Mientras Valentín le preguntaba por su alianza con Bush y Blair, Telecinco mostraba las imágenes de la cumbre de la s Azores como fondo de pantalla. Aznar zanjó el asunto como lo ha hecho hasta ahora: "Cuando uno entiende que el 11-S cambió la historia del mundo", le queda claro que "hicimos lo que teníamos que hacer".
4. DÍA DE REFLEXIÓN: "Sólo nos falta que nos apaleen y además pidamos perdón"
Aznar lamentó que durante la víspera electoral, "quien luchaba contra el terrorismo era insultado y el algún caso agredido, y eso también hay que contarlo. Espero que no vuelva a pasar. Calificó lo ocurrido de "presión antidemocrática". Valentín le preguntó por qué compareció Rajoy siendo candidato y estando también en jornada de reflexión. Aznar fue esta vez más directo: "Sólo nos queda que apaleen a nuestra gente y además pidan perdón por el mero hecho de existir".
Ya tocando a su fin la entrevista, Aznar volvió a recordar que ha sido "un honor" ser presidente del Gobierno y que Rajoy hubiera sido "un extraordinario presidente". Aclaró que no tiene intención de presidir el partido tras el próximo Congreso y, pese a la sorpresa de Valentín –hasta le pidió perdón por estropearle una noticia– negó que el Gobierno en funciones haya planteado nombramientos de magistrados para el Constitucional.
Última pregunta: ¿"No era así como pensaba retirarse?". "Me voy con las manos limpias, yo no escribo la Historia. Me voy con la cabeza alta" y, añadió, "con el sufrimiento de los que han sufrido".