Nintendo habla de la secuela de Zelda y de la sucesora de Nintendo DS

El máximo dirigente de Nintendo, el japonés Satoru Iwata, concedió una interesante entrevista al periódico nipón Asahi Shimbun, en la que dejó entrever cuáles serán los planes de la compañía de cara a 2010 en Wii y Nintendo DS.

Rompiendo la costumbre de Nintendo, su presidente no se negó a dar algunos detalles sobre por dónde podrían ir los tiros de la futura sucesora de Nintendo DS, su exitosa consola portátil. "[La nueva portátil] tendrá que tener gráficos altamente detallados y, necesariamente, tendrá un sensor con la habilidad de leer los movimientos de la gente jugando", señalaba Satoru Iwata. Los comentarios no fueron muy extensos, pero es la primera vez que Nintendo habla públicamente sobre la sucesora de Nintendo DS, que en marzo cumplirá ya 5 años en Europa. Eso sí, por ahora no ha querido dar fechas para su lanzamiento, pues DS aún está en plena forma, alcanzando cifras récord de ventas durante este pasado 2009.

En lo referente a Wii, Iwata comentó que tras el frenazo de ventas que tuvo la consola de sobremesa a mediados de año, las cosas han vuelto a su cauce y sus cifras de ventas ya se han recuperado totalmente. Según comentaba el presidente de Nintendo en la entrevista, "Ahora estamos seguros y podemos decir que Wii se ha recuperado de su bajada de ventas. No estoy seguro de si es prudente usar palabras como renacimiento y recuperación, pero estamos seguros de que podemos mantener este momento". Según cifras que maneja la propia Nintendo, estiman que en diciembre podrían haber superado los 3 millones de Wii vendidas en Estados Unidos, cifras superiores a las registradas en diciembre del año anterior (2,15 millones).

Sobre el futuro de Wii de cara a este año, hay dos acontecimientos importantes en la agenda de Nintendo. Por un lado la nueva entrega de la saga Zelda, que ha confirmado su lanzamiento para finales de este 2010. Y por otro lado el Wii Vitality Sensor, un nuevo periférico del que poco se sabe, y sobre el que prometen revelar detalles en un evento que ha fechado para el mes de julio.