Según informaciones de Contact Music, las personas más cercanas a Mischa Barton, de 23 años de edad, están muy preocupadas por ella, por su estado de salud y por sus condiciones anímicas, tanto que incluso han llegado a pensar que la actriz podría llegar a suicidarse.
Fueron esas personas cercanas a Barton las que, acogiéndose a la orden 5150 de la legislación californiana, llamaron a la Policía y forzaron el ingreso de la actriz en un hospital psiquiátrico. Dicha orden permite a los agentes policiales o a un médico ingresar por la fuerza a una persona que sufra un desorden mental que ponga en peligro su vida o la de los demás.
Por dicha norma una persona puede ser retenida contra su voluntad durante 72 horas, aunque ese plazo puede alargarse hasta los 14 días si los médicos lo recomiendan. "Mischa está muy mal. Se está quedando sin dinero y no puede encontrar el amor. Se encuentra en una espiral cuesta abajo. Está desequilibrada. Es una suicida", afirma una fuente cercana a la actriz al diario The New York Post.
De momento, Mischa Barton continúa ingresada en el hospital Cedars-Sinai Medical Center de Los Angeles en observación, según ha confirmado el representante de la actriz. Amigos de la protagonista de The O.C. que no asistió el jueves al estreno de su última película, Homecoming, señalaban recientemente que Barton se encontraba en una "senda destructiva" de abuso de las drogas y consideraban que le llevaría mucho tiempo recuperarse.
"Es una persona torturada y conflictiva. Puedes sobrevivir a una mala crítica, pero cuando no apareces en la premiere de tu nueva película, no es una buena señal de hacia dónde se dirige tu carrera", comentaba un amigo. La orden 5150 de la legislación de California fue la misma a la que se acogieron los agentes cuando en 2008 tuvieron que ingresar a Britney Spears en un psiquiátrico.