El invitado de César Vidal este lunes en Es la noche de César, Ignacio Arsuaga explicó que Hazte Oír, la organización que preside, es un "grupo de ciudadanos conscientes de lo que pasa, que queremos hacer algo para que también se escuche su voz", en asuntos como la defensa de la vida, la familia, y las libertades frente a las agresiones del Estado.

Arsuaga subrayó que Hazte Oír es "absolutamente independiente", y lo financian "los 3.000 socios pagan una cuota" y los donativos que reciben. Cinco miembros de este grupo, entre ellos Arsuaga, estuvieron el pasado jueves en la tribuna de invitados del Congreso asistiendo al debate parlamentario sobre la nueva ley del aborto. Arsuaga consideró que fue un día muy "triste" en el que se vio que "el Parlamento está muy dividido", pero que "el Gobierno tiene suficientes apoyos para sacar adelante esta ley".

Sin embargo, Arsuaga dijo que "como católico" aún tiene "esperanza" de que la ley finalmente no sea aprobada. El presidente de Hazte Oír abogó por "hacer llegar nuestro mensaje a toda la sociedad, así podemos llegar también a una parte importante de los votantes socialistas", ya que en estos momentos "el 25 por ciento de los votantes está en contra de esta ley" y "si esa parte se plantea dejar de votar el PSOE puede hacer recapacitar a Zapatero, sabemos que es muy complicado pero lo vamos a intentar".

Como católico, Arsuaga también opinó del artículo José Bono en El País para justificar su voto a favor de una ley contraria a la doctrina de la Iglesia. "El articulo es antológico porque incluso cita una encíclica de Juan Pablo II para decir que sí se podía apoyar esta ley, cuando lo que decía el Papa es que se podía apoyar una ley que restringiese el aborto y esta ley lo que hace es establecer el aborto libre", dijo Arsuaga. Por ello consideró que el artículo del presidente del Congreso "es un cinismo absolutamente total", y recordó a Bono que frente a lo que él dice "no hay nada más propio de los católicos", que en este tipo de cuestiones situar la conciencia por encima de la ley.

El PNV, partido tradicionalmente católico, también apoya la ley, algo que Arsuaga no sorprende demasiado ya que "no es un partido que se caracterice por su defensa de la vida humana, lo hemos visto en otros casos".

Respecto a la postura de la Conferencia Episcopal, Arsuaga señaló que "en una sociedad democrática, aconfesional, la Iglesia se dirige a sus miembros y quien no se identifique con la Iglesia no tiene que acatar sus normas". Arsuaga recordó que los obispos sólo dijeron "el derecho a la vida de todo ser humano es una de las normas básicas de la Iglesia" y "los que no lo reconozcan están fuera de la comunión de la Iglesia, no es que hayan hecho una excomunión, han puesto encima de la mesa un hecho objetivo". Y reiteró que, como toda organización, tiene derecho a dirigirse "a sus fieles" y velar por el cumplimiento de sus "normas internas".