El Príncipe de Asturias, don Felipe de Borbón, fue uno de los primeros en acudir al Palau, así como también el ex presidente de la Generalidad Jordi Pujol y Adolfo Suárez, hijo del que fue el primer presidente del Gobierno en democracia.
El presidente catalán, José Montilla, recibió el féretro de Solé Tura a su llegada a la sede de su gobierno y acompañó a la familia, entre quienes se encontraba la consejera de Justicia, Montserrat Tura, sobrina del fallecido. También pasaron por la capilla el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu; la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde; el consejero de Interior y Relaciones Institucionales, Joan Saura; el consejero de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, entre otras personalidades de la clase política catalana.
La familia, sorprendida
El hijo del ex ponente constitucional Jordi Solé Tura, Albert Solé, aseguró que la familia está "sorprendida" por la respuesta y el cariño ciudadano expresado tras la muerte de su padre, uno de los padres de la Constitución.
"Hace mucho tiempo que la gente se me acercaba por la calle y me decían cuánto querían a mi padre", aseguró en declaraciones a los medios tras instalarse la capilla ardiente. "Era una sensación permanente desde que desapareció de la vida pública de una forma un poco brusca debido a su enfermedad".
La capilla ardiente permanecerá abierta al público hasta las 20 horas y a las 16.15 horas ya había decenas de ciudadanos haciendo cola para despedir al que también fue ministro de Cultura durante el Gobierno de Felipe González.