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ADIÓS AL MUNDOBASKET (92-89)

Serbia acaba en el último instante con el sueño español

Pese a ir por detrás en el marcador durante todo el partido, España ha tenido la victoria en su mano en los últimos instantes. Sin embargo, un triple de Teodosic desde su casa a falta de tres segundos terminaba por hundir al equipo de Scariolo, que no podrá revalidar título en el Mundobasket.

Pese a ir por detrás en el marcador durante todo el partido, España ha tenido la victoria en su mano en los últimos instantes. Sin embargo, un triple de Teodosic desde su casa a falta de tres segundos terminaba por hundir al equipo de Scariolo, que no podrá revalidar título en el Mundobasket.

El partido comenzó con ambos equipos más inspirados en ataque que en defensa. El madridista Velickovic y Bjelica, reciente fichaje del Caja Laboral Vitoria, anotaban insistentemente desde el perímetro, si bien los de Scariolo se mantenían en el partido merced al siempre inspirado Juan Carlos Navarro (13-13). Pero el nivel defensivo de España continuó muy lejos del deseado, y el citado Bjelica seguía dando muestras de todo su potencial ofensivo, obligando al seleccionador español a parar el partido por primera vez, tras un parcial de ocho a cero para los balcánicos (21-13).

El parón le vino bien a los españoles, y al final de los primeros diez minutos llovía menos (27-23), debido a una nueva racha de ese anotador compulsivo que es Navarro. El de Sant Feliú logró que sólo los problemas de Raül López para defender a Teodosic cerca del aro sirvieran para mantener la renta serbia tras el primer parcial.

Cuando llegó la hora de los reservas, y con los protagonistas del juego hasta el momento en el banquillo, ambos equipos disminuyeron lógicamente su ritmo anotador. El partido se embarulló, y el pívot del Barça Fran Vázquez demostró cuan alto pueden llegar sus doscientos once centímetros para cerrarle a los pivots serbios el camino al aro español con dos tapones consecutivos (29-28).

Sin embargo, el rendimiento ofensivo no era el idóneo, y Serbia, tras un triple de Teodosic, volvió a amagar con escaparse (40-32). Por suerte para España, Jorge Garbajosa demostró en dos acciones consecutivas seguir muy inspirado, como durante todo el torneo, desde la línea de seis veinticinco, pero el ritmo anotador de los serbios había puesto de nuevo la velocidad de crucero. Al descanso, las cosas no pintaban bien para una España que había terminado pagando sus concesiones defensivas del comienzo (49-41).

España pasa a dominar

Todo pareció cambiar en la reanudación. España se puso las pilas y, en dos minutos, logró algo que parecía imposible hasta el momento: liderar el marcador. Un parcial de diez a cero desató el entusiasmo de los muchos españoles presentes en el imperial Sinan Erdem (49-51). Garbajosa anotaba como en los mejores días, Ricky demostraba su omnipresencia defensiva y Rudy y Navarro derrochaban calidad. España había vuelto a su mejor versión, aunque los puntos del NBA Nenad Krstic no permitían confianza alguna a los de rojo (59-62). De hecho, poco después, Velickovic volvía a dar la iniciativa a los suyos tras dos buenas acciones ofensivas (63-62). Así las cosas, se llegó a los diez últimos minutos con el pase a la lucha por las medallas en plena lucha (67-64).

Ya en el último cuarto, España parecía pagar el cansancio físico y psicológico tras los minutos de éxtasis de la remontada, y el cuarto triple de Keselj encendió todas las alarmas (72-64). Sergio Scariolo situó al equipo a defender en una zona 2-3, pero su equipo no era capaz de atajar las embestidas del nuevo referente serbio, el ala pívot del Power Electronics Valencia Dusko Savanovic (77-69), muy acertado en el momento clave del duelo.

Pero los intentos de remontada españoles no terminaban de surtir efecto. A tirones, los de Scariolo consiguieron ponerse a sólo tres de la mano de Navarro (79-76), pero un par de errores defensivos permitieron algún que otro lanzamiento cómodo de los serbios, como uno de Savanovic que asestó una puñalada que olía a letal a cuatro minutos de la conclusión (86-78). Sin embargo, a los campeones hay que matarlos. Un parcial de seis a cero liderado por un Rudy Fernández que exhibía todas sus cualidades físicas metió a España de nuevo en el partido (86-84), obligando a Dusan Ivkovic a pedir tiempo muerto para amarrar un partido que los serbios parecían tener en el partido unos segundos antes.

Un final para recordar

Un triple imposible de Keselj, otro más, pese a la buena defensa española, metió los ánimos hispanos en el congelador, pero entre Navarro y Marc Gasol se las arreglaron para igualar el tanteo a ventiseis segundos de la conclusión (89-89).

Había llegado la hora de los grandes, esos momentos en que no puede temblar la mano si se quiere ser recordado. Milos Teodosic, uno de los puntales de la nueva generación serbia, y que totalizaba un paupérrimo dos de ocho en lanzamientos desde la línea de tres, se hizo amo y señor del balón. Botó la bola con parsimonia, buscando a su presa, el aro español. Cuando el reloj marcaba tres segundos para la conclusión, el base del Olympiakos del Pireo realizó un lanzamiento lejanísimo que heló el corazón de un país entero y ascendió al Olimpo del baloncesto. La última jugada no sirvió para nada, y España vio como uno de sus grandes estandartes hincaba la rodilla, pese a haberse dejado el alma en el intento.

Ficha técnica:

Serbia, 92: (27+22+18+25): Teodosic (12), Rasic (0), Bjelica (14), Velickovic (17) y Perovic (2) –cinco inicial-, Tepic (2), Paunic (0), Markovic (0), Savanovic (15), Krstic (13), y Keselj (17)
España, 89: (23+18+23+25): Ricky Rubio(3), Navarro (27), Rudy Fernández (15), Garbajosa (18), y Marc Gasol (13) –cinco inicial-, Llull (4), Raúl López (0), Felipe Reyes (2), Vázquez (4), Mumbrú (3), y San Emeterio (0)

Árbitros: Estévez (argentino), Kennedy (estadounidense), y Aylen (australiano)
Pabellón: Sinan Erdem (Estambul). 11.000 espectadores

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